Nosotros Las palabras tienen la palabra VIBREMOS POSITIVO Eventos

Contraluz / A PROPÓSITO DE...

Ma. del Carmen Maqueo Garza

23 de Mayo: Día del Estudiante. No es mal momento para reflexionar acerca de algunos aspectos de este grupo poblacional, y su estado actual.

La obligatoriedad de la instrucción secundaria ha elevado la escolaridad en nuestra población de menores de veinte años; de igual modo, la introducción de carreras técnicas ha constituido la oportunidad para que muchos alumnos cuenten con un título de educación profesional. Anteriormente, era uno de cada diez alumnos que entraba a la primaria, el que finalmente obtendría un título universitario.

Las oportunidades se multiplican para los jóvenes, aunque la competencia viene siendo mayor, y desgraciadamente los índices de aprovechamiento escolar dejan mucho qué desear. Ello nos ha colocado en el concierto internacional en un lugar muy bajo con relación a otras naciones.

Los alumnos de primaria aprenden los conocimientos básicos; probablemente muchos de ellos de memoria. El maestro ha dejado de lado trabajar con la lectura de comprensión, y el desarrollo de habilidades críticas. Llega este mismo chico a secundaria, y seguirá acarreando viejos malos hábitos, de suerte que para exponer un tema lo transcribe en carteles, y posteriormente lo lee. Le ha faltado ejercitar su capacidad de análisis, y más aún, la de síntesis. Por un resumen entiende amputar el texto original de aquí y de allá, y hacerlo caber en unos cuantos renglones. No queda claro en su mente el proceso de pensamiento para abarcar el todo, analizarlo, sintetizarlo, y posteriormente emitir conclusiones del texto revisado, con relación a un universo de conocimiento dado.

Llega este chico a la preparatoria, o a la carrera técnica, y no por hacerlo se corregirán de manera espontánea los vicios que viene arrastrando. Ahora, con el recurso de la computadora, posiblemente elabore un trabajo hilvanando una serie de textos ajenos, en un plagio espectacular que ni siquiera se tomó la molestia de leer; mucho menos de comprender. Felicito a los maestros que encargan a los muchachos los trabajos a la vieja usanza, escritos a mano, lo que obliga al chico a consultar directamente las fuentes, discriminar, y finalmente redactar.

Fuera de lo que es el mundo de las aulas, el estudiante actual está siendo sometido a una serie de elementos frente a los cuales no siempre tiene las herramientas para manejar. En días pasados se estableció una campaña local en Piedras Negras para regular la venta de material pornográfico. Autoridades al cargo de la misma recorrieron locales de renta de cintas de video y de venta de revistas, conminando a los dueños a no mostrar directamente las portadas de dicho material. Sin embargo poco se habrá logrado cuando a las seis de la tarde, en uno o varios canales de televisión por cable, y no se diga de recepción directa, abundan los materiales cargados de sexualidad aberrante, para los que un niño de kinder tiene acceso, con sólo encender el televisor.

Los tiempos actuales son tiempos de niños solos. De alguna manera, y por muy diversas circunstancias, nuestros pequeños y jóvenes terminan pasando buena parte de su día por cuenta propia, sin la presencia de padres o tutores. Ello los lleva a volverse independientes, lo que en cierta forma es una ventaja, aunque por otra parte tanta independencia resulta peligrosa, cuando sobra iniciativa y falta madurez. No pocas veces se está creando el caldo de cultivo perfecto para el fracaso en los proyectos de vida.

Nuestros chicos han subestimado en mucho el valor de la lectura; la encuentran poco atractiva; la interpretan como una pérdida de tiempo, y harán el libro a un lado en cuanto les sea posible. Ello constriñe aún más los elementos de juicio con que el chico sólo puede contar para salir adelante exitosamente.

Resulta doloroso ver madres adolescentes embarazadas, quienes reniegan en contra de ese hijo nonato, culpándolo de haber truncado sus oportunidades de diversión. Es doloroso ver cómo chicos de quince o dieciséis sumidos en el mundo de la coca, capaces de cualquier cosa con tal de obtenerla; en ratos parecen espectros andantes, ajenos a la realidad, extraviados.

Afortunadamente son los menos. Tenemos una gran población juvenil ansiosa de aprender, absorber, probarse, y probarnos de que es capaz. Una población entusiasta, con sueños, planes y proyectos. Un contingente de hombres y mujeres de un mañana muy próximo, dispuesto a poner todo su empeño en la vida. Para todos y cada uno, quienes hoy festejan, ¡enhorabuena¡ Sepan que nuestros mejores deseos, y toda nuestra fe, están con ustedes.

maqueo33@yahoo.com.mx

Leer más de Nosotros

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Nosotros

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 214328

elsiglo.mx