Comer, beber, viajar, vivir
Viajar a Buenos Aires, a Roma, a Bombay, sin necesidad de moverse del sofá. Es lo que cada miércoles por la noche ofrece el canal Travel and Living, de Discovery, que deleita a los amantes del buen vivir transmitiendo Ciudades y Copas, Trotamundos y Sin Reservas.
Nunca turista, siempre viajero, Anthony Bourdain es una celebridad. El hombre que hace honor al título de su programa al recorrer el planeta así, sin reservas, se da a conocer cuando The New Yorker publica sus recomendaciones sobre el mundo culinario de la ciudad que nunca duerme. Muy pronto firma un jugoso contrato con la cadena de televisión Travel and Living y sus libros se ubican en la lista de los más vendidos.
Chef del restaurante Les Halles de Manhattan, escritor de novelas policiacas, filósofo y gurú gastronómico, Bourdain logra capturar en sesenta minutos la esencia de los lugares que visita. La agudeza de sus comentarios y lo cáustico de su humor condimentan cada emisión.
La producción de Sin Reservas ha tenido el tino de seleccionar como anfitriones del gigantesco chef a personajes tan pintorescos como él; nuevos ricos rusos, pescadores italianos, industriales de oriente, matronas caribeñas, que lo mismo le enseñan a preparar platos típicos en la sencillez de sus cocinas, que a pedir un exquisito postre en el restaurante más caro.
Uno de los mejores episodios de Sin Reservas se graba en París. Bourdain prueba el ajenjo, la bebida conocida como el hada verde, favorita de poetas y pintores, prohibida por provocar alucinaciones y detonar crímenes. Un tanto mareado, se hospeda en el hotel donde murió Óscar Wilde. Llega de madrugada a una panadería para desayunar los mejores croissants del mundo. Para culminar su estancia en La Ciudad Luz, reflexiona, sentado en la terraza de un café, acerca de lo que distingue a los parisinos del resto de los mortales; su pasión por la buena vida.
Bourdain acepta cualquier reto que se le presenta. Salta de un avión junto con los Elvis Voladores de Las Vegas. Se atreve a probar el pez globo, capaz de matar a quien lo degusta si no se ha preparado adecuadamente. Después de beber vodka como un cosaco se da un chapuzón mientras el termómetro marca una temperatura de varios grados bajo cero. Durante un viaje a Beirut, para hablar de la exquisita gastronomía de esa ciudad, queda atrapado en medio del conflicto que ha enfrentado a judíos y árabes.
El logro de Sin Reservas es valorar la gastronomía como una parte fundamental de la cultura de cada país. Si a esto se le suma la presencia de una personalidad como Anthony Bourdain, el resultado es comparable con un platillo preparado por el mejor chef.
soozbaez@yahoo.com