Espectáculos Miss Universo Christian Nodal Julión Álvarez

Control Remoto

Azucena Báez

Segundas y terceras partes...

En estos días las diferentes cadenas de televisión anuncian con bombo y platillo sus estrenos. Cruzan los dedos para que el público sintonice las nuevas series y se mantenga fiel a las que sobrevivieron otra temporada.

MTV le apuesta a Laguna Beach 3, el reality show que -supuestamente- retrata personajes y situaciones reales de una de las comunidades más prósperas y atractivas de Estados Unidos. Promete captar la esencia del verdadero Orange County, distinguiéndose de The OC, programa de Warner Channel que ha gozado de altos niveles de audiencia.

En su primera temporada, Laguna Beach seguía las ?privilegiadas? vidas de ocho adolescentes a punto de graduarse de la preparatoria local. Cada episodio estaba plagado de pleitos, hipocresía, cuernos e intrigas. Las archirrivales Lauren ?LC? Conrad y Kristin Cavallari se peleaban por el amor de Stephen que al final se quedó como el perro de las dos tortas.

En cambio, Lauren y Kristin salieron ganando. La primera consiguió que MTV le diera un programa, The Hills, situado en Los Ángeles a donde LC se mudó para estudiar diseño de modas y trabajar como becaria en la revista Teen Vogue. Cavallari no se quedó atrás y ha visto crecer la fama que le obsequió la serie al trabajar ahora como modelo, actriz y hasta vocera de PETA.

La secuela de Laguna Beach pasó sin pena ni gloria y lo único que cambió fue el triángulo amoroso, integrado en esa ocasión por Jason, Jessica y Alex, pertenecientes a una generación más gris y aburrida que su antecesora. De acuerdo con el programa, en la comunidad de 25,000 habitantes, ellos se pasan la vida jugando golf y metiéndose al jacuzzi con la que se deje; ellas, comprando ropa, robándose a los novios y organizando fiestas de las que sacan a patadas a sus rivales.

¿Qué novedades presenta Laguna Beach en su tercera temporada? Ése es precisamente el problema, no hay nada nuevo. Y carga con la misma desventaja que otros realities; para garantizar el éxito de la serie los productores terminan contratando a clones de los personajes que conquistaron al público la primera vez.

El factor sorpresa se va acabando con episodio y la serie comienza a decaer. Lo que va en aumento son las protestas de muchos adolescentes de Laguna Beach que se resisten a ser comparados con sus conflictivos, superficiales y monosilábicos paisanos. Tanto en el cine como en la televisión se aplica el mismo refrán, segundas partes nunca fueron buenas. Aunque en el caso de Laguna Beach, más bien debería precisarse que segundas y terceras partes pueden ser aún peores que las originales.

soozbaez@yahoo.com

Leer más de Espectáculos

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Espectáculos

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 246227

elsiglo.mx