Pekín, (EFE).- Un corredor de bambú comunicará a dos grupos de pandas gigantes que habitan en las montañas de Qinling (noroeste de China) y quedaron separados por la construcción de una autopista hace 23 años, informaron fuentes ecologistas.
"El establecimiento de un corredor verde de bambú ayudará a ambas poblaciones de pandas a desplazarse sin ser molestadas por las actividades humanas y la nacional 108", dijo en un comunicado enviado a EFE Dermot O'Gorman, representante del Programa para China del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, siglas en inglés).
En los próximos dos meses, voluntarios del WWF y del Departamento Forestal de la provincia de Shaanxi plantarán un 87 hectáreas de bambú a ambos lados de un túnel que cruza la carretera.
De este modo, las poblaciones de pandas del Monte Tianhuashan, donde viven unos 20 ejemplares, y el Monte Xinglongling, con 110, volverán a estar conectadas.
WWF comenzó en septiembre del año pasado a restaurar el hábitat de los pandas en esta zona montañosa, que está bajo protección estatal desde el año 2002.
El panda gigante, una de las especies en mayor peligro de extinción, sólo se encuentra en estado salvaje en China, donde viven unos mil 600 en las provincias de Shaanxi, Sichuan y Gansu, que se unen a los 600 que viven en reservas.
La restauración de su hábitat para mantener la integridad de la población, la adopción de medidas contra la caza ilegal y la formación de personal especializado son algunas de las iniciativas que WWF propone para garantizar la supervivencia de este animal.
