Hay tres centros de prostitución donde la infidelidad conyugal queda de manifiesto en los machistas
El Siglo de Durango
EL ORO, DGO.- La pérdida de valores, machismo, feminismo e ideas neoliberales, son factores que influyen en el aumento de divorcios, cuyo problema persiste en los 39 municipios del estado.
Cerca del 60 por ciento de las parejas en México se separan, mientras que el 30 por ciento se divorcian de manera legal; Durango está dentro de la media nacional, según estadísticas oficiales del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) e Investigaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Faustino Villa Cárdenas, párroco del templo de Nuestra Señora de la Merced, de Santa María del Oro, aceptó que desafortunadamente la separación y el divorcio han afectado de manera considerable a la sociedad duranguense, causando severos problemas de desintegración familiar.
Dijo que las causas de la ruptura de la pareja pueden ser muchas, al igual que sus repercusiones, pero todo desemboca en la pérdida de importancia a la familia como núcleo de la sociedad.
Según estudios realizados por la investigadora de la Facultad de Psicología de la UNAM, Emilia Lucio, en el país 30 de cada 100 parejas que contraen matrimonio se divorcian debido a la falta de tolerancia y de comunicación, sin embargo, al incluir a las parejas que sólo se separan sin realizar trámites legales esta cifra se duplica.
De acuerdo con las estadísticas más recientes, de las parejas que se casan el 30 por ciento se divorcia en menos de cinco años; otro 30 por ciento permanece en su matrimonio y 13 por ciento busca otra pareja, de lo que se desprende que los cónyuges que están unidos durante largo tiempo son sólo la tercera parte.
Esto no sólo se queda en aceptar el divorcio, instituido en México desde 1917 como normal o parte del proceso natural de sociedad, sino que las parejas se vuelven a casar y a divorciar, lo que convierte las relaciones humanas afectivas en un círculo vicioso.
En el estado de Durango los últimos datos del INEGI arrojan que en promedio el hombre se divorcia cerca de los 35 años, mientras que la mujer a los 33, basándose en el total de los casos que se presentan en la entidad, siendo cada vez más baja la edad que presentan dichas rupturas.
Desorden
La emigración, prostitución e infidelidad han sido motivo de separaciones y divorcios en los últimos años, no sólo en el municipio de El Oro, sino en la región del Norte de Durango, manifestó Faustino Villa.
Solamente en la cabecera municipal hay tres lugares donde se practica la prostitución abiertamente, es ahí donde comienza la desintegración de algunos hogares, pues es bien sabido que hay quienes se gastan su dinero en las mujeres que venden su cuerpo y a sus casas llegan sin un peso.
Por otra parte, comentó que la infidelidad es una falta de la que tarde o temprano la pareja se va a dar cuenta, dejando secuelas de odio, amargura y resentimiento, se crea una desconfianza que lleva a la pareja a la separación.
En este error incurren principalmente los hombres por el machismo que aún existe en el medio, no obstante algunas mujeres emprenden aventuras amorosas sin importarles sus hijos, quienes son los más afectados con esta situación.
Mientras que hay hombres que se van a Estados Unidos con la esperanza de conseguir un trabajo que traiga estabilidad y bienestar económico a sus familias, muchos al estar allá se olvidan de los seres queridos que dejaron, para hacer una nueva vida en el vecino país del norte.
Exhorto
El padre Faustino Villa Cárdenas comentó que el problema de la ruptura en el matrimonio se torna cada vez más grave, el cual lejos de bajar en las estadísticas, aumenta cada año sin control, por lo que la iglesia hace el llamado a dar mayor seriedad a esta institución divina.
La vida en pareja es un mandato establecido por la Sagrada Biblia, ?lo que Dios unió que no lo separe el hombre?, ?por tanto dejará el hombre a su padre y madre?, de tal manera que se persuade al pueblo cristiano a no caer en el error de dividir y fracturar a sus familias.
Comentó que la Iglesia Católica pide el matrimonio por la iglesia con la finalidad de hacer un compromiso serio, que no es superado por el casamiento Civil, ni mucho menos por la unión libre.
Señaló que son las malas acciones las que más afectan a la vida de pareja, por lo que es necesario dejar las prácticas deshonestas, para dedicar el tiempo merecido a la familia.
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Primero hacen la prueba
Para la sociedad actual es fácil hacer y deshacer compromisos, en ese sentido las nuevas generaciones han optado por no casarse, pues primero prueban si pueden vivir juntos, comentó el padre Faustino Villa Cárdenas, párroco del Templo de Nuestra Señora de la Merced.
Esta nueva conducta está dejando hijos sin padres, madres que tienen que trabajar todo el día para mantener a sus familias y sobre todo niños con una gran cantidad de conflictos emocionales, situación que se hace evidente al visitar las escuelas primarias del municipio de El Oro, comentó.
La juventud no es consciente de que engendrar a los hijos es una responsabilidad de las más grandes, por eso en la actualidad hay hijos no deseados, criados de abuelos o dados al vicio y delincuencia, pues carecen de la falta de atención de sus padres, incluso algunos ni los conocen, platicó.
Incidencia
En los últimos 36 años la incidencia en los divorcios ha aumentado de forma considerable en el país.
Año porcentaje
1970 3.2
1980 4.4
1990 7.2
2000 7.4
2001 8.6
2002 9.8
2003 11
2004 11.3
2005 30
Nota: Al sumar a las parejas que sólo se separan, incluyendo a las que viven en unión libre, el último porcentaje aumenta al 60 por ciento.
FUENTE: INEGI.
