AGENCIAS
Berlín, ALEMANIA.- El número de aves salvajes encontradas muertas en el noreste de Alemania a causa de la gripe aviar aumentó a 103, informaron ayer las autoridades sanitarias.
En todos los casos se trata de la cepa H5N1 del virus, la más peligrosa para las personas. El principal foco de infección sigue siendo la isla de Rügen, en el Mar Báltico, aunque ya son diez los casos de gripe aviar detectados en aves que han sido sacrificadas o halladas muertas en el litoral continental.
La zona costera alemana bañada por el Báltico se encuentra desde el lunes bajo alarma de catástrofe, pues la situación ?no está aún controlada?, en palabras del ministro de Agricultura del Estado federado de Mecklenburgo-Pomerania, Till Backhaus.
Mientras, continúan las tareas para recoger aves muertas, trabajo en el que sólo en Rügen colaboran más de 270 soldados en la inspección de granjas avícolas y sacrificio de animales.
En Rügen hay 800 granjas avícolas con un total de cerca de 400 mil animales.
En distintos puntos de la isla se establecieron puestos de control y se ha limitado el tráfico rodado. Todos los automóviles que salen de Rügen han de pasar por puestos de desinfección.
El mal amenaza a cuervos de londres
Los cuervos de la Torre de Londres han sido retirados al interior de la fortaleza para protegerlos de la amenaza de la gripe aviar, mencionó ayer su cuidador.
Según la leyenda, si los cuervos abandonan la fortaleza levantada en el Siglo XI junto al río Támesis, su Torre Blanca se desplomará y caerá el reino de Inglaterra. El rey Carlos II decretó en el siglo XVII que debe haber siempre seis cuervos en la Torre.
Una vocera de la Torre indicó que los cuervos fueron llevados al interior de la fortaleza como ?medida temporal? y residirían en un aviario construido especialmente para ellos. Los cuervos son llamados Branwen, Hugine, Munin, Gwyllum, Thor y Baldrick.