El delantero de la selección mexicana de futbol Jared Borgetti, criticó la actuación del silbante suizo Massimo Busacca, al tiempo de rechazar que la eliminación en octavos de final en la Copa del Mundo Alemania 2006 sea un fracaso cuando se buscaba llegar a la siguiente ronda.
LEIPZIG, ALEMANIA
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"Las individualidades de parte del árbitro fueron las que marcaron diferencia. Eso sí, fue un golazo (el de Maxi Rodríguez en tiempos extras), ante eso no puedes hacer nada", expuso tras la derrota ante la albiceleste.
Para el atacante del Tricolor las decisiones del silbante suizo fueron determinantes en el resultado final, en particular al perdonar dos veces la expulsión al defensor central Gabriel Heinze.
"Tuvo dos oportunidades para mostrársela, en el primer tiempo en la jugada que dices (sobre Francisco Fonseca) y en el segundo tiempo cuando me dio a mí un manotazo en la cara, todavía tuvo el descaro de decirme que sí lo vio pero que no fue intencional", apuntó.
La solución para que México trascienda, luego que ligó su cuarta Copa del Mundo en que es eliminado en octavos de final "a lo mejor sería haber jugado con la playera de Argentina y que Argentina jugara con la de México para que nos hubiera ayudado como lo hizo con ellos".
Apuntó que "obviamente me voy triste porque no pudimos ganar, pero tranquilo porque hicimos un gran esfuerzo, intentamos hacer lo mejor posible, jugar al futbol de lo mejor, ser superior al rival y dejarlo todo dentro de la cancha y en ese sentido me hace sentir bien".
Para el jugador del Bolton Wanderers de la Liga Premier de Inglaterra "de los cuatro partidos que jugó México en este mundial ningún rival fue mejor que el Tri, obviamente hoy se vio mejor porque llevas tres partidos y juegas ante un rival donde es a un partido y tienes que jugártela toda, se jugó el mejor partido del mundial".
"Me queda amargo (sabor de boca) por lo que pasó dentro de la cancha, pero yo se los dije desde que estaba en México, a mí no me importa si se juega o no el quinto partido, yo me voy tranquilo poque vi un equipo de México que jugó mejor que el que tenía enfrente, por una situación u otra no avanzamos", expuso el delantero.
En tono tranquilo afirmó "mi cabeza está tranquila, mi conciencia está tranquila, mi corazón también porque sé que dentro de la cancha los jugadores mexicanos fuimos mejores, y no me importa si la gente o los especialistas del futbol dicen que hicimos lo mismo que otras selecciones".