El presidente de la FIFA, el suizo Joseph Blatter, recordó ayer el compromiso de la organización en la lucha contra el racismo en el futbol, cuestión en que el Gobierno alemán considera que el Mundial ha dado una señal muy positiva.
BERLÍN, ALEMANIA
EFE/NOTIMEX
Los próximos días viernes y sábado en que tendrán lugar los partidos de cuartos de final de la Copa del Mundo de Alemania, serán oficialmente de manifestación contra el racismo, además de que los capitanes de las selecciones participantes leerán un documento sobre el tema.
"Es una pena, pero el demonio del racismo tiene todavía su lugar en el futbol", recordó en conferencia de prensa el presidente de la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA), Joseph Blatter.
Por su lado, el ministro del Interior alemán, Wolfgang Schaeuble, señaló que "el Mundial, sin embargo, es un programa fantástico para la lucha contra el racismo y la xenofobia".
Schaeuble, indicó que este Mundial, "con la emoción que ha derrochado y los lugares de concentración, abarrotados por los aficionados, ha hecho una gran aportación contra el racismo y la discriminación en Alemania, aunque esta lucha no termina con la final en Berlín".
Para el político conservador alemán, la lucha contra el racismo concierne a "todas las personas de un país, especialmente a las fuerzas políticas" y externó su temor que, tras el 9 de julio, la rutina se apodere del país y las declaraciones de buenas intenciones al respecto queden atrás.
No en vano, poco antes del comienzo del torneo deportivo se sucedieron las informaciones en el país europeo de que determinados individuos y grupos racistas y neonazis planeaban actividades durante las cuatro semanas del Mundial.
Por tal motivo, los ocho capitanes de las selecciones que estarán en los cuartos de final leerán un comunicado contra el racismo a sus seguidores en las ciudades en las que se jugarán los partidos los días 30 de junio y 1 de julio: Berlín, Hamburgo, Frankfurt y Gelsenkirchen.
El tema del racismo tendrá una importancia máxima durante la celebración del Mundial 2010 en Sudáfrica, según las conclusiones a las que llegaron los expertos deportivos en Berlín. "Nos alegramos ya por el próximo torneo y le sacamos la tarjeta roja a la intolerancia", dijo Tokyo Sexwale, miembro del Comité Organizador.