Un mal común durante el otoño e invierno es la sinusitis, caracterizada por la inflamación de uno o más de los senos paranasales, con frecuencia debido a una infección bacteriana.
EL UNIVERSAL
Las enfermedades respiratorias son un quebradero de cabeza durante todo el año, pero sin duda se convierten en una verdadera amenaza en la temporada de frío, incluso en estos días del otoño en que los cambios bruscos de temperatura son impredecibles.
Especialistas en otorrinolaringología explican que este tipo de infecciones son sumamente comunes, en especial las de las vías respiratorias altas. Entre las más populares cuentan al resfriado común, amigdalitis, sinusitis y laringitis. Estos problemas casi siempre son causados por virus y rara vez ponen en peligro la vida, pero es frecuente que sean bacterianos, por lo cual requieren de un tratamiento antibiótico apropiado para alejarlos.
Expertos de la farmacéutica Pfizer dicen que uno de populares males del frío invernal es la sinusitis, que se caracteriza por la inflamación de uno o más de los senos paranasales, con frecuencia debido a una infección bacteriana.
Advierten que la sinusitis se presenta con mayor frecuencia durante el otoño, el invierno y la primavera. Generalmente se desarrolla como una complicación bacteriana de una ITR viral, como el resfriado común. En algunos casos la infección del seno maxilar se desarrolla como una extensión de una infección dental.
Acción directa
Afirman que la sinusitis es más común en los adultos y que entre los síntomas están dolor de cabeza y facial, secreción acuosa nasal y posiblemente fiebre. En un grado extremo, agregan, puede presentarse una meningitis o un absceso cerebral, si una infección del seno maxilar se disemina al cerebro.
Para enfrentar este mal y otras infecciones respiratorias, existe Factive-5, afirman la doctora Maricarmen García, gerente médico de la División Antiinfecciosos en Pfizer México, y el doctor Peter C. Appelbaum, profesor de la División de Patología Clínica del Colegio de Medicina en Pensilvania. Es un fármaco para el tratamiento de infecciones de las vías respiratorias superiores, como exacerbación de sinusitis, bronquitis crónica bacteriana y neumonía adquirida.
Explicaron que un amplio número de estudios clínicos respaldan la eficacia del medicamento para la erradicación de bacterias en las infecciones respiratorias agudas, las cuales siguen siendo una de las principales causas de mortalidad en nuestro país.
En su opinión, las infecciones bacterianas -como algunas que producen la sinusitis- pueden llegar a afectar las funciones principales del tracto respiratorio, el cual tiene como función principal el oxigenar la sangre, por lo cual la presencia del fármaco en él dotará a los médicos de una herramienta confiable para erradicar la infección bacteriana.
Appelbaum y García dicen que entre las bondades del medicamento destacan una significativa reducción de recaídas al lograr la erradicación bacteriana y fomento al seguimiento del tratamiento, al ser éste de corta duración: cinco días en todas sus indicaciones.
Los expertos dicen que tiene una particular eficacia contra los patógenos más comunes que causan neumonía adquirida y bronquitis crónica bacteriana.