El Siglo de Durango
Cada día se inhabilitan 30 estacionómetros porque las personas insisten en introducirles objetos extraños que provocan su falla en las lecturas de las monedas, comenta Teresa Ramírez Rueda, responsable de esta área.
Meses atrás, el vandalismo hizo de las suyas en contra de estos aparatos medidores de tiempo; sin embargo, en la actualidad los daños por estas causas han desaparecido y lo atribuyen a la presencia del Sistema Municipal de Monitoreo (Simmon).
Pero todavía hay ciudadanos que introducen objetos tales como papel que afectan el funcionamiento de los parquímetros y, por eso, se requiere que estén fuera de servicio por algún tiempo para que sean reparados.
De las calles Independencia a Regato y de Gabino Barreda a Francisco Sarabia hay mil 230 aparatos instalados, mismos que reciben supervisión todos los días.
?Tenemos aparatos que los dañan temporalmente. Les meten objetos extraños que impiden la correcta lectura de las monedas. Un promedio de 30 aparatos de deshabilitan (sic) temporalmente mientras el personal de mantenimiento hace lo correspondiente?, comenta.
El Departamento de Estacionómetros cuenta con 24 operativos entre personal de mantenimiento, recolectores de moneda y 11 administrativos.
La funcionaria municipal asegura que es suficiente la plantilla con la que cuentan y que, incluso, la propia ciudadanía reporta cuando algún estacionómetro se encuentra mal.
Lo cierto es que cuando un usuario argumenta que el aparato está mal cronometrado, se complica la comprobación del error.
Ayer, en las instalaciones de esta área, un ciudadano que omitió su nombre reclamaba que puso el dinero necesario para 40 minutos pero, en la realidad, sólo duró 25. Fue infraccionado y, en su defensa, acudió a plantear la falla de la máquina.
Sin embargo, la respuesta fue que tenían que traer el parquímetro y que en presencia del usuario se introducirían las monedas para ver si marcaba bien el tiempo. Así, se tenía que esperar.
Y como tenía trabajo por hacer mejor prefirió pagar la multa para reincorporarse a sus actividades lo más pronto posible.
Sin embargo, Ramírez Rueda afirma que sí se han dado casos de infracciones que son anuladas cuando no se les respetaron los minutos que pagaron.