EL UNIVERSAL-AEE
CHETUMAL, QUINTANA ROO.- La madrugada de ayer domingo, personas desconocidas arrojaron dos granadas de fragmentación en el patio de la Subdelegación de la PGR, ubicada en la colonia Guadalupe Victoria, en Chetumal, Quintana Roo. No hay muertos, ni heridos, sólo daños materiales.
Luis Alfonso Aguilar Salgado, comisario de la Policía Estatal Preventiva informó que a las 01:00 horas de ayer domingo, tuvieron conocimiento a través del teléfono de emergencia -066- de la explosión. Dispusieron un operativo de seguridad en la ciudad y en las salidas de la demarcación, sin hallar a los responsables de este ilícito.
?No hay muertos, ni heridos, sólo daños materiales, en una ventana y puerta de la Subdelegación de la PGR?, dijo.
Resultaron dañados dos vehículos estacionados en el patio de esa corporación policiaca federal, una camioneta negra Dodge con placas de Quintana Roo UTA-44-761 y un Sentra gris con placas URS-32-02, del Estado. Además del temor que creo entre los vecinos.
Más de diez unidades de la Policía Estatal Preventiva y del grupo SWAT del Municipio de Othón P. Blanco mantiene custodiado el edificio de la subdelegación de la PGR.
En tanto que en su interior elementos del Ejército Mexicano, del Ministerio Público Federal, del Fuero Común y de la AFI, realizan las primeras investigaciones de este atentado.
En tanto que al subdelegado de la PGR en Chetumal, Armando Pérez Narváez no se le ha visto en ninguna de estas diligencias.
Una fuente cercana a la PGR afirmó que pidieron la intervención de la SIEDO, para que coadyuve en las investigaciones y paradero de los responsables de este ilícito. De ahí que en cualquier momento arriben agentes federales de la Siedo a Chetumal.
Este ataque se registra, después de la ejecución de dos altos jefes de corporaciones policiacas y la detención de cinco presuntos sicarios en Quintana Roo.
El 27 de junio, fue ejecutado en Cancún Wilfrido Flores Saucedo, jefe del Estado Mayor de la Policía Municipal Preventiva, Tránsito y Bomberos de Benito Juárez, y el pasado primero de agosto a las puertas de la PGR en la misma ciudad, fue ejecutado Sam Rodríguez Rodríguez, subdelegado de la dependencia.
En Chetumal, el 27 julio fueron detenidos cinco presuntos sicarios del cártel del Golfo, con un importante arsenal de armas, entre las que se encontraban armas de uso exclusivo del Ejército Mexicano.
