Torreón Calidad del aire Peregrinaciones Tránsito y Vialidad

DE POLÍTICA Y COSAS PEORES

ARMANDO CAMORRA

El individuo le dice a la linda chica que bebía en el bar: "Tengo un reloj que no solamente marca la hora: también adivina cosas". "¿Ah sí? -sonríe la muchacha-. A ver: ¿qué puede adivinar tu reloj acerca de mí?". Responde el tipo: "Déjame preguntarle". Se inclina sobre su reloj de pulsera y le musita algo en la carátula. Luego se lo lleva al oído en actitud de quien escucha algo. En seguida le informa a la muchacha: "Dice el reloj que no traes panties". La chica se echa a reír. "Se equivocó -dice muy divertida-. Mira, sí traigo". Y así diciendo muestra una fracción de la pequeña prenda. "No me lo explico" -declara el tipo, desconcertado. Luego, dándose una gran palmada en la frente, exclama: "¡Ah, ya sé! ¡Es que tú y yo vamos a ir dentro de un rato a mi departamento, y el reloj anda adelantado!"... Libidiano estaba en el hospital. "No entiendo a esa enfermera -se afligía-. Me dice: ?Vamos a tomar nuestra pastillita?; ?Vamos a comernos nuestra sopita?... Pero cuando le agarro las pompas no da la cachetada en nuestras mejillitas; la da en la mía nada más"... La señora leía el periódico. Le comenta a su esposo: "Parece que la Marina quiere comprar un destroyer". Exclama el marido con alarma: "¡Diles que tu mamá no está en venta!"... Aquella muchacha de tacón dorado tenía una tarifa: 100 dólares por hacerlo en el suelo; 200 por hacerlo en el sillón; 300 por hacerlo en la cama. Llegó un escocés y le dio 100 dólares. Lo hicieron en el suelo. Llegó un francés y le dio 200 dólares. Lo hicieron en el sillón. Llegó un mexicano y le dio 300 dólares. Exclama la muchacha: "¡Vaya, hasta que llegó alguien de categoría! Ven, vamos a la cama". "No -aclara el mexicano-. Quiero tres en el suelo"... Tanto Madrazo como López Obrador no dicen lo que piensan ni piensan lo que dicen. El discurso de ambos es taimado y cauteloso, discurso de políticos que con nadie se quieren malquistar. Se les pregunta, por ejemplo: "¿Qué opina usted de la eutanasia?". Madrazo contesta: "Estoy a lo que diga la ley". Y responde AMLO: "Estoy a lo que diga la voluntad del pueblo". Luego se les pregunta: "¿Qué horas son?". AMLO contesta: "Estoy a lo que diga la voluntad del pueblo". Y responde Madrazo: "Estoy a lo que diga la ley". Felipe Calderón, en cambio, expresa su pensamiento con honradez y claridad. Seguramente sus respuestas sobre algunos temas debatibles no son compartidas por todos, pero nadie dejará de reconocer que de los tres principales candidatos el panista es el que muestra en su discurso más reciedumbre de carácter y más honestidad... Pasado mañana aparecerá aquí el chiste más bellaco y ruin que es dable imaginar. Yo mismo me resisto a publicarlo, pero la libertad de prensa está por encima de las preocupaciones personales. El próximo viernes, pues, lean mis cuatro lectores esa incalificable narración... Un viejecito llegó con el doctor. Le dice: "No oigo nada por el oído izquierdo". El médico procede a examinarlo y le extrae con su pinza un supositorio. "¿Escucha bien ahora?" -le pregunta. "Perfectamente -responde el ancianito-. ¿Me permite su teléfono?". "¿Para qué?" -quiere saber el facultativo. Responde el viejecito: "Para avisarle a mi mujer que ya sé dónde está mi aparato para la sordera"... Dos tipos charlaban en el bar. Dice uno: "Me gustan las mujeres que usan minifalda. Cuando veo una mujer con minifalda sé que estoy ante una mujer que no vacila en tomar sus propias decisiones". Dice el otro: "A mí me gustan las mujeres que usan tatuaje". "¿Por qué?" -se extraña el amigo. Explica el otro: "Cuando veo una mujer con tatuaje sé que estoy ante una mujer que no vacila en tomar una decisión que luego lamentará toda su vida"... FIN.

Leer más de Torreón

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Torreón

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 194782

elsiglo.mx