Bebían en la cantina tres amigos, e intercambiaban confidencias. "Mi esposa es una fiera -dice Wormilio-. Cuando llego con copas a mi casa me arma un escándalo tan grande que se entera todo el vecindario?. Confiesa Medrosio: "A mí me sucede lo mismo. No puedo llegar oliendo a alcohol porque mi vieja se me echa encima como un obelisco? (NOTA: Quería decir "basilisco?). "Pues yo no tengo ese problema -dice Jactancio con orgullo-. Lo que ustedes necesitan es fajarse los pantalones, imponerse. Sean hombres. Yo no tengo que andar pasando por esos ridículos apuros?. Terminada la reunión llega Jactancio a su casa, más ebrio que una cuba. Como queriendo demostrar lo que les había dicho a sus amigos entra dando un portazo. Se abre paso aventando los muebles y se planta al pie de la escalera. "¡Vengo borracho, y qué!? -anuncia con un sonoro grito. Se quita el saco y la corbata y los arroja al suelo, retador, al tiempo que empieza a subir por la escalera. "¡Vengo borracho, sí! -vuelve a gritar a todo pulmón-. ¡Vengo bien borracho!?. En la puerta de la recámara se desgarra la camisa abriéndola violentamente con las manos y luego se da con los puños en el pecho, como gorila. Golpea luego la pared con tremebundos manotazos y grita otra vez con voz de trueno: "¡Vengo borracho, y me vale!?. Entra en la habitación, prende la luz, tumba de una patada una silla, y cae que no cae se planta al pie de la cama y vuelve a gritar con tono desafiante: "¡Vengo borracho! ¡Vengo bien borracho! ¡Y qué, y qué, y qué!?. En ese momento se vuelve hacia el espejo y se mira ahí reflejado. Se dirige a su propia imagen y con una gran sonrisa exclama lleno de felicidad: "¡Carajo! ¡Qué a toda madre es ser soltero!?... Dígase lo que se diga, pienso que doña Historia será benévola al juzgar a Fox, y creo que a fin de cuentas el Presidente actual rendirá buenas cuentas. Desde luego en el terreno de lo anecdótico don Vicente no sale bien librado. Hubo personas cercanas a él que lo dañaron mucho. Pero dejará una economía firme, y nadie podrá negar que en su sexenio disminuyó la tasa de pobreza. Si se hiciera una encuesta tengo la certidumbre de que la mayoría de los mexicanos aprobarían en lo general la administración de Fox. Una prueba de eso es que los priistas resintieron el efecto Madrazo, y los perredistas resintieron al final -y siguen resintiendo- el efecto López Obrador, pero los panistas no resintieron mayormente el efecto Fox, y eso que Fox no fue partidario de la candidatura de Felipe Calderón. Muchos errores cometió Fox, algunos graves, y no pudo llevar a cabo las reformas que urgentemente necesita este país. Pero eso no es responsabilidad exclusiva suya: también la cerrazón de los partidos fue motivo de que esos cambios no se hayan conseguido. Es imposible, por lo demás, vencer en un sexenio la inercia de 70 años de régimen autoritario. Por eso tengo la certidumbre de que al paso de los años Fox será considerado como un Presidente honesto, de buena fe, que por obra de las circunstancias de su tiempo, y de sus propias limitaciones personales, no hizo todo lo que hubiera querido hacer... Llorosa y compungida Susiflor le pregunta a su mamá: "¿Te acuerdas de aquel muchacho que te dije que era tan dulce que parecía hecho de azúcar??. "Sí, lo recuerdo -contesta la señora-. ¿Qué pasa con él??. "¡Me engordó!? -dice Susiflor prorrumpiendo en sollozos... El recién casado les cuenta a sus amigos: "Desde que me casé, cada día es como un día de campo". "¿Pura alegría y felicidad?" -le preguntan. "No, -responde él-. Lo único que me da mi mujer es un sandwich frío en plato de cartón"... La robusta señora se estaba pesando en la báscula del baño. Le pregunta su marido: "¿Quién dijo: ?¡Ah caón!?? ¿Tú o la bascula??... FIN.