Por CATÓN.
Quasimodo -el jorobado de Nuestra Señora de París- fue con Claudio Frollo y le dijo: "Acaba de salir un nuevo medicamento, padre. Cómpremelo por favor". Pregunta el arcediano: "¿Qué medicamento es ése, y para qué lo quieres?". Responde Quasimodo: "Se llama Viagra. Si lo tomo a lo mejor me enderezo"... Decía una señora: "Mi abuela era una mujer muy fuerte. Enterró cinco maridos. Y eso que dos de ellos no se dejaban enterrar"... Don Chacuacio acudió al dentista. "Doctor -le dijo-. Soy fumador, y los dientes se me están poniendo amarillos. ¿Qué me recomienda?". Le sugiere el odontólogo: "Use corbata café o anaranjada"... Los escoceses, ya se sabe, tienen fama de ser excesivamente ahorrativos. Jock MacDuff estaba agonizando. Pregunta con el último aliento de la voz: "¿Está aquí mi amada esposa?". "Aquí estoy, querido" -responde la mujer conteniendo un sollozo. "¿Están aquí mis amados hijos e hijas?". "Aquí estamos todos, padre". Y dice con enojo Jock: "Y entonces ¿qué diablos hace prendida la luz de la cocina?"... Capronio, sujeto ruin y desconsiderado, visitó una casa de mala nota. Vio a las señoras que ahí prestaban sus servicios y comentó en voz alta: "Están muy viejas". Oyó aquello la madama y reprendió muy ofendida al lenguaraz: "Tenga respeto, señor mío. Recuerde que nuestra profesión es la más antigua del mundo". "¿De veras? -finge interés Capronio-. Y ¿cuál de ustedes es la fundadora?"... Felipe Calderón no debe hacer un gobierno de coalición: en esto de gobernar no hay coaliciones. Menos aún debe hacer un cogobierno: el poder no se comparte, so riesgo de perderlo. El Presidente electo debe formar, sí, un gobierno de inclusión. E incluso ese gobierno de inclusión no debe ser tan incluyente. Sería un error que Calderón cediera espacios a los volatineros de la política -los Muñoz Ledo, los Camacho Solís y similares-, lo mismo que a restos desprestigiados del priismo o a personeros de la izquierda radical. Tanto en la izquierda democrática como en el PRI hay hombres y mujeres valiosos, de buena fe, capaces, dispuestos a participar en un gobierno que dé prioridad a la justicia social y busque solución a los problemas derivados de la pobreza que sufre la mayoría de los mexicanos. El nuevo Presidente sólo podrá iniciar su gestión con posibilidades de buen éxito si logra conjuntar un gabinete en el cual estén representadas las diversas corrientes políticas democráticas, las que fincan su actividad en los valores de una sana convivencia: libertad de pensamiento y expresión; aceptación del pluralismo; tolerancia a las ideas de los demás; afirmación del estado de Derecho y consagración de la democracia como sistema político. Para lograr eso Calderón deberá alejarse lo mismo de la derecha extrema, intolerante y dogmática, que de la extrema izquierda, dogmática e intolerante. Él mismo deberá escoger a sus colaboradores, sin olvidar que los head hunters o cazadores de cabezas, aquéllos a que recurrió Fox, cobraron como cabeza principal la de quien los contrató. Un gobierno así, plural, marcaría el contraste entre una administración incluyente, de diálogo, y la actitud de exclusión e intolerancia de los patéticos aprendices de golpistas... Don Algón llegó temprano a su oficina. Lo acompañaba su esposa. Tan pronto la linda secretaria hizo acto de presencia el ejecutivo la llamó por el interfón: "Venga a mi oficina, Rosibel". Pregunta ella: "¿A lo de siempre, jefe, o llevo libreta y lápiz?"... Platicaban dos viejitos. Dice uno: "La artritis es una enfermedad indeja". Le pregunta el otro: "¿Por qué dices eso?". Explica el primero: "Te pone rígidos todos los miembros, menos el que quisieras que estuviera así"... FIN.
MIRADOR
Por Armando FUENTES AGUIRRE
Este hombre es el hombre común. Por ser común deberíamos escribir su nombre con mayúsculas: El Hombre. No es un gran hombre, y por no serlo es grande. Quiero decir que tiene la grandeza de los pequeños.
Trabaja este hombre cada día. Trabaja para ganar su pan y el de los suyos. En él habita el mal que todos los hombres llevamos por ser hombres, pero él procura que su vida sea de bien. No hace daño a nadie. Vive y deja vivir.
Este hombre es el hombre común. A la suma de estos hombres se le llama comunidad. Los gobernantes deben gobernar para esa comunidad. Porque todos estos hombres son el hombre. El Hombre.
¡Hasta mañana!..
