Por CATÓN
Pepito se quedó dormido en el asiento de atrás del coche de su hermano. El muchacho, que no se dio cuenta de que Pepito estaba ahí, fue en el coche por su novia y la llevó a un romántico paraje. Pepito despertó al oír que su hermano decía a la muchacha: "-¡Chin! ¡Se me acabó la gasolina!?. Y Pepito, inadvertido, fue testigo silencioso de la más tórrida escena de amor que sus infantiles ojos habían contemplado. Al día siguiente Pepito invitó a su vecina Rosilita a pasear con él en su triciclo. Se dirigió a la parte de atrás de la casa y detuvo en un protector rincón el viejo velocípedo. "-?!Chin! -le dice a Rosilita-. ?¡Se me acabaron los pedales!?... Estaban platicando dos señoras. "-Le anuncié a mi esposo -dice una-, que lo voy a dejar?. "-¿Y cuál fue su reacción?? -pregunta la otra-. "-Caray -responde pensativa la primera-. Vives toda la vida con un hombre y no acabas de conocerlo. Hasta ahora supe que Oprimicio puede gritar de gusto, silbar alegremente, cantar lleno de regocijo y echarse maromas de contento todo al mismo tiempo?... El famoso pianista dice a la fea y vieja señora que se le insinuaba descaradamente: "-Madame: me recuerda usted una sonata de Beethoven?. "-¿La Appassionata?? -pregunta ella-. "-No, señora -replica él-. La Patética?... Simpliciana, joven inocente recién llegada de su pueblo a la gran ciudad, fue invitada por Wolfrano, paisano suyo, a conocer su casa. Después de mostrarle las habitaciones le dice el hombre: "-Ahora vamos allá afuera, Simpli. Quiero enseñarte mi piscina?. "-¡Ay, Wolfrano! -se aflige ella-. ¡Ya vas a empezar con peladeces!?... La pérdida del respeto a la ley trae consigo grandes males, lo mismo que el afán de los particulares de interpretar las normas a su conveniencia. Debe haber un orden jurídico claro que obligue a todos, y que todos cumplan. Decir esto no es deformación abogadil, sino consecuencia del principio de que no puede existir una comunidad humana si no se organiza sobre bases de certidumbre que otorguen seguridad a todos los que integran ese grupo. Oaxaca es triste ejemplo de los extremos a los que se puede llegar cuando ese orden se desconoce y es sustituido por la voluntad caprichosa de un grupo o una facción... El salaz individuo detiene su lujoso automóvil deportivo junto a la linda muchacha que caminaba por la calle. "-Oye, guapa -le dice-. Ven a pasar conmigo un rato. Te pago buen dinero?. "-¡Oiga! -protesta furiosa la muchacha-. ¡No soy lo que usted cree!?. Ante esa reacción el tipo se dispone a retirarse. Lo detiene la muchacha: "-Pero dígame -le pregunta-. Por pura curiosidad: si yo fuera lo que usted cree, ¿cuánto me pagaría??... El niño estaba haciendo su tarea. "-Oye, papi -pregunta a su papá-. ¿Cuál es la ley de la gravedad??. "-No sé -responde el tipo-. El caón gobierno está sacando tantas leyes que ya no sabe uno ni cuáles son?... La tienda de ropa para dama anunció una fabulosa barata de vestidos de maternidad. Como es natural la calle donde estaba la tienda se llenó de señoras embarazadas que acudieron presurosas a aprovechar la oferta. Un borrachito que vio aquel desfile se rasca la cabeza y dice muy intrigado: "-¡Carajo! ¿Qué ya nadie lo hace por amor al arte??.... La madura señorita soltera dice al señor cura en el confesionario: "-Me acuso, padre, de que anoche estuve con un hombre. Me hizo el amor tres veces?. "-Muy bien -le indica el sacerdote-. Ve ahora mismo a tu casa, parte seis limones y chúpalos?. "-¿Esa es mi penitencia?? -pregunta ella-. "-No, -le dice el sacerdote-. Eso es para ver si se te quita la sonrisota que traes de oreja a oreja?... FIN.
MIRADOR
Por Armando FUENTES AGUIRRE
Le dijo la niñita a su papá:
-Al otro lado de la luna brilla una luz como de oro, y en medio de esa luz se ve una mariposa.
-¡Ah! -pensó el señor para sí-. ¿Lo que es la imaginación de los pequeños!
Y sonrió.
Allá muy lejos, en otra parte del cielo, en otro astro, una niñita le dijo a su papá:
-Al otro lado de la luna brilla una luz como de plata, y en medio de esa luz se ve un conejo.
-¡Ah! -pensó el señor para sí-.¡Lo que es la imaginación de los pequeños!
Y sonrió.
¡Hasta mañana!..
