Un amigo le pregunta a Babalucas: "¿Qué piensas del aumento a la gasolina?". Responde el badulaque: "A mí no me afecta. Yo siempre echo 100 pesos"... El troglodita estaba arriba de un dinosaurio. Un compañero suyo le comenta a otro: "Dice que acaba de inventar la zoofilia"... El Pato Donald sorprendió a Daisy en trato de coición con un ganso jovencito. Antes de que el indignado pato pudiera hacer cua-cuá le dice Daisy: "No me reclames nada, Donald. Siempre te dije que me gustan mucho los gansitos"... En el atestado elevador una linda chica le dice al oído a su amiga: "No voltees, pero el hombre que está muy pegadito atrás de ti es joven y guapo". También en voz muy baja responde la otra: "Sin necesidad de voltear ya me di cuenta de que es joven". (No le entendí)... Un lechero se quejaba: "Esto del desempleo me está perjudicando mucho". Le pregunta alguien: "¿Vendes menos leche?". "No -replica el lechero-. Pero por causa del desempleo ahora más maridos están en su casa"... El padre Arsilio reprendía a Empédocles Etílez, el borrachín del pueblo. Le dice: "Si sigues bebiendo así nunca llegarás a viejo". "¡Fantástico, padrecito! -se alegra el temulento-. ¡Ya sabía yo que el vino es el agua de la eterna juventud!"... Don Poseidón, granjero acomodado, viajó a la ciudad. Una curuja le ofreció sus servicios fornicarios, y le informó que su tarifa era de mil pesos. "¿Mil pesos? -se burla el vejancón-. En mi pueblo las muchachas lo hacen por un par de medias". "Entonces -le pregunta de mala manera la buscana-, ¿qué viene a hacer a la ciudad?". Replica don Poseidón: "A comprar medias"... Una comadre le cuenta a otra: "Tuve un pleito con mi marido. Desde hace tres semanas estoy en huelga de piernas cruzadas". "¡Habérmelo dicho antes, comadrita! -exclama la otra-. ¡Sin saberlo la he estado haciendo de esquirol!"... El doctor Dyingstone, famoso explorador, iba con su mujer, señora grande y gorda, por un paraje ignoto en el corazón de África. El grupo se topó con una banda de salvajes. Tras de conferenciar con el jefe de los aborígenes el doctor Dyingstone se dirige a su mujer y le dice: "Insisten en que te vayas con ellos, Porcilina. Son caníbales, y no pude convencerlos de que aceptaran cuentas de vidrio y espejitos"... Aquel náufrago llevaba ya dos años viviendo en una isla desierta. Cierto día tres hermosas chicas, náufragas también, llegaron a la isla en una balsa. De inmediato el náufrago fue hacia ellas con expresión libidinosa. Las tres exclamaron con angustia: "¡Oh no!". Pasaron cuatro meses. Un día las tres bellas muchachas fueron con expresión libidinosa hacia el náufrago. Y exclamó él con angustia y débil voz: "¡Oh no!"... ¿Qué tienen en común una foca y un niño asustadizo? A los dos les gusta dormir con el foco prendido... Novilio y Ninfeta, recién casados, hacían el amor dos veces diarias. Lo hacían con metódica puntualidad de tren inglés: la primera antes de levantarse para ir a trabajar, a las 6.15 de la mañana; la segunda al irse ya a acostar, a las 9.15 de la noche. Sucedió que Novilio pilló un fuerte catarro, y se hizo inyectar una buena dosis de penicilina. Todos los gérmenes fueron aniquilados por el medicamento, menos tres. Dice uno: "Temo que el ataque se repita. Me esconderé en el cóndilo medial del húmero, encima de la tróclea. Ahí los anticuerpos no me encontrarán". Dijo el segundo: "Yo también temo un segundo ataque. Me ocultaré en el panículo carnoso del platisma. Ahí tampoco me hallará el enemigo". Y dice el tercero: "El ataque seguramente se repetirá. Quédense ustedes si quieren; yo me voy en el de las 9.15"... FIN.