TORREÓN, COAH.- Un grupo de aproximadamente cien personas provenientes de los distintos municipios de Coahuila y Durango, tomaron de manera pacífica las oficinas de la Agencia de Trabajo Coahuila Martínez, ubicadas en calle Escobedo 893 al oriente de la ciudad.
Los inconformes arribaron a dichas oficinas para exigir el cumplimiento del contrato en el cual se estipulaba que, previo pago de seis mil pesos por persona, se les conseguiría empleo en la Unión Americana, principalmente en los estados de Georgia y Virginia.
Un grupo de 40 personas se dirigió posteriormente a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia Laguna I, donde se entrevistaron con Fernando Ruiz Castañeda, titular del área receptora de denuncias, quien se excusó sin motivo aparente por no poder levantarles la denuncia.
Ante dicha negativa, el grupo regresó a las oficinas de la empresa donde anunciaron un plantón permanente, mismo que mantendrán hasta que las autoridades detengan a los presuntos defraudadores. La subdelegada de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) Laura Cecilia Rodríguez Gutiérrez, ofreció asesoramiento legal por parte del departamento jurídico de la dependencia federal.
El director de la empresa de nombre David Martínez Guzmán (de quien se ignora su paradero), a través de distintos promotores, perifoneo y distribución de panfletos, lanzó una convocatoria a principios del mes de febrero del presente año ofreciendo empleo en Estados Unidos a las personas desempleadas.
Tan sólo en la Comarca Lagunera de Coahuila y Durango, se estima que son mil las personas defraudadas, sin embargo, el número a nivel nacional se estima supere las cinco mil, ya que dicha empresa tenía oficinas en Zacatecas, Chihuahua, San Luis Potosí, Jalisco, Aguascalientes, entre otros.
Fuentes de la Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE) que pidieron no ser identificadas, señalaron que la empresa Agencia de Trabajo Coahuila Martínez, anteriormente se había establecido en la región bajo el nombre de Agencia de Trabajo al Exterior, con oficinas en calle Ramón Corona número 125 de la colonia Centro, de donde desapareció sin explicación alguna.
Además, actualmente las autoridades federales investigan el destino de los pasaportes de los trabajadores defraudados, ya que se presume que éstos son utilizados para introducir de manera ilegal a ciudadanos centroamericanos al país en su paso a Estados Unidos.