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ADDIS ABEBA, ETIOPÍA.- Los equipos de rescate de Etiopía intensificaron ayer sus labores para rescatar a miles de personas que quedaron aisladas tras el desbordamiento de dos ríos a causa de las intensas lluvias, que han dejado cerca de 900 muertos.
Los rescatistas a bordo de helicópteros lanzan cuerdas a quienes se encuentran en los techos de sus casas o en los árboles a causa de las inundaciones que afectan al país desde la semana pasada, según reportes radiales procedentes de la nación africana.
De acuerdo con las emisoras, al menos 11 localidades se encuentran inundadas tras el desbordamiento del río Omo, uno de los más caudalosos del país y que corre cerca de la frontera con Sudán.
Las autoridades etiopíes han advertido que más ríos se han desbordado en el norte, sur, este y oeste del país y que las principales presas están a punto de hacerlo.
La organización Médicos Sin Fronteras (MSF) precisó que al menos diez mil personas han sido desalojadas de lugares cercanos al lago Tana, que amenaza también con desbordarse.
En la región de Amhara, a 560 kilómetros al norte de la capital, Addis Abeba, 13 mil personas fueron desalojadas en 13 villas afectadas por las precipitaciones. Según expertos, la nación se caracteriza por tener llanuras áridas y castigadas por la sequía, lo cual impide a esos terrenos absorber los altos niveles de las precipitaciones que se registran de junio a septiembre en el cuerno africano.
El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan, ha lamentado la pérdida de vidas humanas y prometió ayuda para los damnificados, en tanto, el Programa Mundial de Alimentos PMA) ya comenzó a distribuir alimentos en el este de Etiopía.
