EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- La invasión de rutas y el robo de placas de taxi son los problemas que aún prevalecen en la Región Lagunera de Durango, mismos que deben ser resueltos por la Subdirección de Transporte del Estado y no sólo aplicar medidas correctivas para la mejora de imagen y servicio público.
Ramón Acosta Barrios, secretario general del sindicato Francisco Sarabia de la CTM de Lerdo, señaló lo anterior tras darse a conocer que durante la semana anterior se aplicaron 115 multas a igual número de choferes del transporte público de taxis y camiones de pasajeros, de Gómez Palacio y Lerdo.
?Éste es un problema de muchos años, del cual hemos enterado al gobernador y a los funcionarios de transporte y no ha tenido solución, venimos padeciendo esta invasión por parte de los taxistas gomezpalatinos?, dijo Acosta Barrios en torno al principal problema que enfrentan actualmente.
Precisó que Gómez Palacio oferta más de 11 taxis por cada mil habitantes y con ello dobla la media nacional que es de cinco, mientras que en Lerdo únicamente se ofertan 3.5 taxis por cada mil habitantes.
?El problema de fondo no es atacado, por ejemplo la desventaja que tenemos los taxistas de Lerdo con los de Gómez Palacio y el robo de placas de las unidades, que es una situación que constituye un delito y debe denunciarse, también ha solicitado que las placas no sean materia de garantía y se baje el costo de reposición?.
Precisó que con ello se tendrían ventajas ?veríamos las unidades portando siempre sus placas trasera y delantera y podríamos dejar como garantía de las infracciones la tarjeta de circulación, la licencia del chofer y en un caso extremo el vehículo mismo?, explicó el líder sindical de los taxis Francisco Sarabia de Lerdo.
Acosta Barrios estableció que el robo de placas es grave y se fomenta, precisamente porque las láminas son garantía de infracción y generalmente se roban una sola.
Robo de placas
El robo de láminas de taxis debe denunciarse ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de Durango, pues se les puede dar un mal uso.
Se les da un servicio de prestación del servicio.
Algunas suelen trasladarse a la capital del Estado.
Otras trabajan en Gómez Palacio y se amparan con una copia de infracción.
Existe la posibilidad de utilizarla para delinquir.
FUENTE: Ramón Acosta Barrios, secretario general de taxis Francisco Sarabia