El Siglo de Durango
Se queja el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana del trato que reciben en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), pues se enfrentan al desabasto de medicinas, el diferimiento de las consultas y operaciones.
Abel Ricardo Pérez, líder del gremio en Durango, señala tema aparte que en su entorno laboral es poco el crecimiento de trabajadores, ya que anualmente se les asignan de dos a tres plazas de nueva creación. Mientras tanto, Teléfonos de México (Telmex) opta por contratar empresas filiales que lo ayudan a no crecer en su planta laboral de base.
Sobre el primer punto, el líder sindical comparte que las luchas con el IMSS son cosa permanente. El problema empieza desde el trato déspota que reciben los pacientes por parte de los que laboran en la dependencia federal de salud.
?El IMSS no reúne las condiciones de un buen servicio?, exclama para luego indicar que para que los pacientes puedan ser atendidos por un médico especialista pasan de dos a tres meses. Y qué decir de las intervenciones quirúrgicas que son programadas, ya que es un tiempo similar.
Sostiene que, en términos generales, el IMSS se encuentra en una situación pésima y que supuestamente, cuando Rodolfo Dorador Pérez Gavilán fungió como delegado estatal, se hizo el compromiso de mejorar el panorama, pero esto no se cumplió.
Platica que en ocasiones, los médicos no brindan el tiempo necesario de las incapacidades, pues la excusa es ?que sale caro?. De allí que las gestiones ante los diferentes directivos de la institución sean periódicas.
Se compadece de aquellos que carecen de un sindicato u organismo que los defienda y dice que los ha visto en un peregrinar constante para mejorar su conflicto. Por eso, añade, muchos de los derechohabientes optan por acudir con un doctor particular para evitar el mal servicio en el IMSS.
Indica que las cuotas que el obrero paga por este concepto son elevadas y, por lo tanto, se merece que la atención médica sea la apropiada y no se tengan esta clase de aprietos.
Sobre los asuntos sindicales que les preocupan, comparte que buscan algunas reformas respecto de las jubilaciones, de modo que se aumente la edad y los años de servicio. Esto es para evitar que a futuro se caiga un déficit de recursos y se provoque una crisis similar a la que ocurre en el Seguro Social.
Esclarece que Teléfonos de México cada año libera de 450 a 500 vacantes en el país, de las cuales sólo le tocan dos o tres a Durango. Además, la empresa, con el afán de no aumentar su plantilla de empleados, recurre a compañías filiales que desempeñan tareas que antaño eran desempeñadas por el propio personal de Telmex.
Todo en calma
Luego de la tensión que se generó a raíz del anuncio de un paro nacional en el que participaría el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana, una vez que se decidió no llevar a cabo este movimiento, la situación es de completa calma, según da a conocer Abel Ricardo Pérez.
El Secretario General de los telefonistas en Durango asegura que la decisión de suspender esta movilización fue porque no quieren enrarecer el clima electoral previo al 2 de julio que se aproxima.
Anuncia que en la siguiente semana es probable que esté en Durango el líder nacional de su gremio, Francisco Hernández Juárez, quien también es presidente colegiado de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), impulsor del movimiento que se tenía programado.
