Señalan que desde que iniciaron los trabajos del Corredor Vial Sureste estos animales han proliferado.
Durango, Dgo.-Los vecinos del antiguo barrio de Cantarranas en últimas fechas viven literalmente entre ratas... sí, ratas carroñeras, ya que desde que se iniciaron los trabajos del Corredor Vial Sureste estos animales han proliferado en abundancia, al grado de que quien pase por esas calles puede constatarlo en menos de cinco minutos.
Las calles Barraza, Ruiz, Rayón, Madrugador, Colón y Domingo Arrieta, del barrio Tierra Blanca (antes conocido como Cantarranas), han sido sitiadas por estos roedores que se han multiplicado al grado de parecer pájaros sobre un árbol específicamente ubicado en la esquina de Rayón y Domingo Arrieta.
En ese lugar al parecer las ratas han establecido su cuartel, ya que hay un espacio entre la banqueta y el pavimento que hace suponer que ahí está el nido, pues los vecinos aseguran que de ahí brotan en grandes cantidades y parten a los diferentes puntos del barrio.
Infinidades de historias urbanas empiezan a circular entre los vecinos; cuenta un propietario de una de las dos tiendas del lugar que él vio un ?pajarito? en un árbol, tan bonito, con un pecho gris que le llamó la atención, ya que era de noche. Sin embargo, al tratar de observarlo mejor el animal dio vuelta y se le vieron cuatro patas y una cola larga que lo hizo sorprenderse ya que se trataba de una rata en lo más alto del árbol en mención.
Los vecinos del lugar manifiestan que se han hecho denuncias a la Secretaría de Salud; sin embargo, no se ha atendido su solicitud de fumigar o de cortar el árbol de la esquina que queda frente al fraccionamiento Providencia.
Otro rumor que ronda en el lugar es que una señora que vive en la casa donde está el jardín les da alimentación y las ha domesticado, ya que cada noche se le ve deambular por estas cuadras con comida que reparte en puntos estratégicos; de hecho, diariamente el árbol luce en su pie diversos alimentos que originalmente la gente pensaba eran para los perros que también cría la señora.
El velador de una llantera que está sobre la calle de Rayón afirma ver cada noche a las ratas pasearse por los cables de televisión de paga; la gente que por ahí camina ha sido testigo de las ratas equilibristas y no cabe su asombro, pues es tema de conversación en la fila de las tortillas y en las tiendas de abarrotes.
La noche del pasado viernes se suscitó un accidente automovilístico en la esquina de domingo Arrieta y Rayón, donde resultó lesionada la señorita Diana Enríquez; esto motivó que se acercaran los curiosos y cuando llegó la ambulancia para auxiliarla los paramédicos encendieron un reflector, ya que ese lugar es lúgubre y al echar la luz en dirección al jardín el árbol se iluminó y cientos de ratas empezaron a bajar y otras a trepar por él, lo que ocasionó que la gente saliera corriendo saltando por encima de la mujer herida (quien pasó a segundo término), ya que toda la atención se desvió a tan desagradable espectáculo.
En algunas ocasiones la gente ha contratado los servicios de empresas fumigadoras y exterminadoras de ratas; sin embargo, se han dado por vencidas ya que el problema no es particular de tal o cual domicilio, sino que en sí es este foco de infección el que tiene azoradas a más de 30 familias que viven por la zona.
Diariamente pueden verse por la calle ratas aplastadas por los automóviles, ya que algunas veces buscan esconderse entre los neumáticos y al momento en las unidades se ponen en marcha les pasan por encima.
Otro aspecto digno de narrarse es el sonido que emiten entre los árboles; cualquier persona que pasa por ahí puede percibir ese ?canto? que da escalofríos, ya que se multiplica en horrores.
Afectados
Los vecinos que sufren la invasión de las ratas viven en las calles:
-Barraza.
-Domingo Arrieta.
-Colón.
-Madrugador.
-Ruiz.
-Tercera de Ruiz.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.