El Siglo de Durango
Existe una notable falta de interés por el manejo de los productos no maderables, por lo que no se están aprovechando adecuadamente y tradicionalmente han sido menospreciados y subutilizados, según lo dio a conocer David Hernández Gómez, gerente regional de la Comisión Nacional Forestal (Conafor).
El funcionario explicó que pese a que Durango también cuenta con muchos recursos no maderables, principalmente en las zonas semiáridas, se les percibe como de poca importancia para la economía, debido a su carácter extractivo y de bajo valor agregado, existiendo gran dificultad para su regularización y su incorporación a las actividades económicas.
Lo anterior se asocia con el hecho de que la mayor parte de la actividad de extracción de no maderables se realiza en zonas campesinas o indígenas en donde se presentan los mayores índices de marginación.
Hernández Gómez reconoció que existe una falta de coordinación entre los integrantes de los sectores y productores, así como desinterés de los prestadores de servicios en ofrecer asistencia técnica en el semidesierto, originado por la carencia de infraestructura.
Sin embargo, aunque el Gerente de la Conafor aceptó que Durango cuenta con una diversidad de especies no maderables, con un potencial importante de aprovechamiento, declaró que los dueños de los recursos no obtienen el beneficio económico, ya que existe desconocimiento del potencial y la problemática de los recursos no maderables de los bosques y del Semidesierto.
Además, se tiene ausencia de un ordenamiento ecológico en la región del Semidesierto, junto con baja disponibilidad de recursos económicos para apoyar las actividades de conservación y protección de los recursos naturales no maderables.
Lo anterior debido a que la extracción de estos productos se realiza con muchas dificultades y limitaciones por las características extremas de su clima y por la forma empírica y tradicional en que efectúan la recolección.
Aunado a esto no existen estudios de mercado para los diferentes productos no maderables que faciliten su comercialización, provocando que en su mayoría su comercialización se realice a través de intermediarios.
?Su aprovechamiento se ha realizado prevaleciendo únicamente el interés comercial y años atrás variados casos sin autorización, que ha permitido que no se genere un mercado formal de estos productos al presentarse las condiciones ideales que fortalecen el intermediarismo?, afirmó.
Como consecuencia, Hernández Gómez declaró que no se está aprovechando adecuadamente para obtener los beneficios económicos que permitan el desarrollo de las comunidades que se encuentran en condiciones de marginación del Semidesierto.
Potencial productivo
De acuerdo con informes de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), en Durango destaca el maguey de las zonas de transición o partes bajas de la Sierra con una producción anual de diez mil 797 toneladas por año, equivalentes al 73 por ciento de la producción total de los no maderables.
Posteriormente se ubica el orégano, con una producción anual de mil 717 toneladas, después lechuguilla con mil 357 toneladas, así como el sotol y la candelilla con 740 y 105 toneladas, respectivamente.
Asimismo, la Conafor dio a conocer que en cuanto a la producción de hongos comestibles las cactáceas, las orquídeas y las plantas medicinales no se da su aprovechamiento, ya que no existe el interés por el desconocimiento de su importancia comercial o investigación sobre sus usos y derivados.
