Investigadores desarrollan una nueva técnica que permite una extirpación más completa de los tumores cerebrales y que además puede ejecutarse en tiempo real.
Londres, (EFE).- Investigadores alemanes han desarrollado una nueva técnica que permite una extirpación más completa de los tumores cerebrales mediante la utilización de un fármaco que hace más visibles las células cancerígenas durante la cirugía.
"Esta técnica supone un avance con respecto a los métodos tradicionales, porque es simple, barata y puede ejecutarse en tiempo real", explica el coordinador de la investigación, el doctor Walter Stummer, en el número de mayo de la revista médica británica "The Lancet Oncology".
Los tumores cerebrales, conocidos como gliomas malignos, tienen un pronóstico pobre a pesar de los diversos tratamientos disponibles en la actualidad.
Los investigadores sugieren que los malos resultados durante la intervención quirúrgica podrían deberse a que es difícil ver donde termina el tumor y donde empiezan las células sanas, por lo que la extirpación es más complicada.
"Las técnicas tradicionales utilizadas para mejorar las resecciones del tumor no han cubierto la expectativas o son aún demasiado caras e incómodas para se utilizadas a gran escala", añade Stummer en el artículo, adelantado hoy a la prensa.
Ante esa situación, los científicos del grupo de estudio ALA-Glioma investigaron una nueva forma de detectar los tumores durante la intervención quirúrgica mediante la utilización de un fármaco llamado ácido 5-aminolevulinico, que causa componentes fluorescentes que se acumulan en el tejido cancerígeno.
"Los tumores pueden ser entonces visualizados con un microscopio durante la neurocirugía con un procedimiento simple, económico y desarrollado a tiempo real", explica el científico.
Los investigadores compararon dos grupos de pacientes, uno que había sido operado con la nueva técnica y otro con los procedimientos tradicionales.
Tras un seguimiento medio de 35.4 meses, descubrieron no sólo que el número de pacientes a los que se había extirpado el tumor completamente era más alto en el primer grupo, sino que un porcentaje mayor de ellos, un 41 por ciento frente al 21 por ciento, sobrevivieron seis meses sin que su tumor progresara.
