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BOGOTÁ, COLOMBIA.- La unidad antisecuestros de la Policía desarticuló una red de secuestradores que operaba al servicio de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), a la que le atribuyen 60 plagios.
“Tras tres años de investigaciones del Gaula (Grupo Antisecuestros) se logra la desarticulación de dos estructuras del frente 53 de las FARC” en un operativo que permitió capturar 16 sindicados, informó el jefe de ese escuadrón, coronel Marco Antonio Pedreros.
La acción se desarrolló en las ciudades de Bogotá, Villavicencio a 75 kilómetros al sudeste de la capital; y Caicedonia, a 180 kilómetros al suroeste, en donde se realizaron 14 allanamientos y permitió apresar a dos presuntos líderes de la banda Yecid Díaz y Miguel Angel Bobadilla, indicó.
Según Pedreros, Díaz participó en por lo menos 60 secuestros y tenía dos órdenes de captura en su contra.
Además del grupo de secuestradores cayó otro de apoyo logístico que proveía de uniformes, municiones, explosivos a las FARC.
El jefe policial declaró que el golpe asestado “es fundamental para la reducción de este flagelo (del secuestro), toda vez que al capturar a estas bandas el frente 53 de las FARC, ya no van a tener esa fortaleza en ciudades claves para seleccionar víctimas y secuestrarlas”.
Explicó que tras la identificación de víctimas y la ejecución del secuestro, la estructura entregaba a sus víctimas a la guerrilla que las internaba en remotas regiones selváticas en donde resultaba prácticamente imposible dar con ellas.
Colombia, considerada a inicios de la década como una de las capitales mundiales del secuestro, logró reducir drásticamente la incidencia de ese crimen que pasó de casi dos mil 500 secuestros extorsivos registrados ese año a unos 380 en 2005.
Aparte, las guerrillas usan el secuestro político, como lo hace con unas 60 personalidades, políticos, policías, militares y tres estadounidenses, algunos cautivos hasta por ocho años y que ofrecen liberar a cambio de que el gobierno les entregue a cientos de rebeldes presos.
Las FARC son la más antigua y poderosa guerrilla colombiana, que combate desde hace 42 años en busca de hacerse del poder para establecer un régimen izquierdista en el país.
