EL SIGLO DE TORREÓN
SALTILLO, COAH.- El gobernador del estado, Humberto Moreira Valdés, advirtió que no meterá las manos por el alcalde de ciudad Frontera, Rogelio Ramos Sánchez, a quien una lideresa del PRI denunció ante el Ministerio Público por amenazas de muerte, luego de un enfrentamiento a golpes que hubo entre ambos.
?Le pedí a Rogelio que buscara la conciliación, el diálogo, la relación directa y afectuosa con la gente, que buscara demostrar que las cosas se pueden resolver con palabras y no como sucedió?, dijo Moreira, frente a quien el martes pasado la lideresa Lilia Mendoza cacheteó al presidente municipal y este respondió torciéndole el brazo e intentando golpearla.
?Le recomendé al alcalde que lo primero que tenía que hacer era ofrecerle a la señora una disculpa?, señaló Moreira Valdés.
Sin embargo, todo indica que el alcalde del municipio enclavado en la región centro del estado no atendió las recomendaciones del gobernador, pues lejos de remediar el conflicto lo acrecentó.
De hecho, la señora Mendoza denunció ante el Ministerio Público que apenas el gobernador se retiró de Ciudad Frontera, el alcalde le llamó para amenazarla de muerte. ?Me dijo que me iba a arrepentir, que iba a pagar muy caro lo que pasó?, recordó la priista.
Ante la Procuraduría General de Justicia en el estado, la mujer también dijo que cada noche, desde que ocurrieron los hechos, ha sido víctima de amenazas de parte de desconocidos.
Debido a la posibilidad de que el caso se resuelva en el Congreso Estatal, incluso con el desafuero del alcalde, el gobernador anticipó que su Administración se mantendrá al margen del conflicto.
?Supe que algunos diputados se inquietaron y están revisando ese caso y nosotros como funcionarios tenemos la obligación de servir a la comunidad. Los municipios son autónomos y por lo tanto los alcaldes no dependen de mí, pero yo espero que Rogelio corrija lo que hizo sino seguramente va a tener problemas con la sociedad y con el Congreso?, puntualizó.
