Jerusalén, (EFE).- Arqueólogos israelíes han descubierto vestigios de un poblado que data del siglo décimo antes de Cristo y ubicado en las mismas excavaciones donde se hallaron los restos de la ciudad bíblica de Caná, en la región de Galilea.
El asentamiento hallado en el sitio arqueológico de Kfar Kana, al norte de Nazaret, existió en tiempos del reino unido de Salomón y del de Israel, que siguió a la división entre éste y Judea, entre los siglos IX y X a.C., informó la Dirección de Antigüedades de Israel en un comunicado.
La directora de las excavaciones, Yardena Alexandre, indicó que se han encontrado indicios de que el poblado fue tomado durante el siglo IX a.C, probablemente por un pueblo enemigo.
Los arqueólogos han encontrado vasijas, gran cantidad de huesos de animales y figuras labradas en barro con la imagen de un escarabajo con forma de hombre y rodeado por dos cocodrilos, así como un sello con la figura de un león, símbolo del reino de Israel.
El asentamiento existió durante setecientos años y en sus estratos se incluyen los restos de la bíblica Caná, según anunciaron los investigadores en diciembre de 2004.
Entre los hallazgos descubiertos de la época de Cristo destacan refugios en pozos subterráneos, unidos a pequeños túneles que fueron aparentemente construidos antes de la revuelta judía contra los romanos en el año 66 de nuestra era.
Tras la destrucción del poblado, fue abandonado hasta que lo rehabilitaron unos colonos en el siglo I.
La identidad de los residentes de este poblado israelita como judíos galileos está confirmada gracias a anteriores investigaciones sobre el terreno, así como por datos históricos que identifican el asentamiento como la "Caná de la Galilea", conocida por un episodio que se narra en el Nuevo Testamento.
De acuerdo con los Evangelios, Caná es el poblado donde Jesús realizó su primer milagro, al convertir el agua en vino para la celebración de una boda.