La enana marrón gira en torno de una estrella en la constelación Pavo.
Las enanas marrones no son estrellas ni planetas porque carecen de la fusión de hidrógeno.
Washington, (EFE).- Un equipo internacional de astrónomos ha descubierto una enana marrón a 12.7 años luz de la Tierra en la constelación Pavo, mediante el telescopio del Observatorio Austral Europeo (ESO) en Chile, reveló hoy la publicación en internet "Universe Today".
Aunque son decenas de veces más grandes que Júpiter, el mayor de los planetas del Sistema Solar, las enanas marrones no son estrellas ni planetas porque carecen de la fusión de hidrógeno.
Esta enana marrón, de la cual se desconoce una identificación, gira en torno de una estrella que tiene sólo una décima parte de la masa de nuestro Sol y con una temperatura media de 750 grados, y es una de las más frías descubiertas hasta ahora.
"Es un objeto valioso porque conocer bien su distancia permite determinar con precisión su brillo intrínseco", señaló Markus Kasper, uno de los astrónomos de ESO.
"Más aún, a partir de su movimiento orbital, deberíamos poder en unos años calcular su masa. Estas propiedades son vitales para comprender la naturaleza de las enanas marrones", señaló.
Aún cuando está a solo 12.7 años luz de la Tierra, esta enana marrón es solo la tercera más cercana. Las dos más cercanas giran en una órbita en torno a la estrella Epsilon Indi, a 11.8 años luz.
ESO, en el que participan España, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Portugal, Suecia, Suiza y Reino Unido, opera en tres emplazamientos distintos en el desierto de Atacama en Chile.
ESO cuenta con el VLT (Very Large Telescope), un conjunto de cuatro telescopios de 8.2 metros de diámetro que fue utilizado para descubrir la enana marrón.