EL UNIVERSAL-AEE
MÉXICO, DF.- En su agenda el presidente Vicente Fox no ha tenido un espacio para entregar los Premios Nacionales de Ciencias y Artes 2005 y esto provoca desencanto entre los ganadores.
La historiadora Elisa Vargaslugo ha perdido la ilusión; la coreógrafa Gloria Contreras lo considera una falta de respeto a la actividad cultural; y el escritor Carlos Monsiváis lo justifica porque está seguro que el retraso se debe a que el presidente prepara una respuesta ?iracunda? al proyecto de muro del Gobierno estadounidense.
Han pasado casi tres meses de dictaminación de los candidatos al Premio Nacional de Ciencias y Artes 2005, el máximo galardón que entrega el Gobierno mexicano. Entonces se informó que la ceremonia de entrega se realizaría en la primera quincena del mes de diciembre de ese año.
Sin embargo, hasta hoy han transcurrido más de 30 días de ese límite y ninguno de los premiados conoce cuándo se le entregará. En años anteriores, la ceremonia de entrega de los galardones ha sido en noviembre o diciembre.
?A finales de diciembre me habló una persona de la Secretaría de Educación Pública (SEP) para decirme que al parecer la entrega sería en enero, pero desde entonces no tengo noticias. Esto me ha provocado desencanto, se pierde la ilusión. Claro que es una gran satisfacción recibir un premio de este tipo, pero se va pasando el tiempo y, no es que se olvide, pero sí se pierde la ilusión que tenía uno de recibirlo?, dice la historiadora de arte Elisa Vargaslugo, reconocida en los campos de la historia, las ciencias sociales y la filosofía.
Como Vargaslugo, el también premiado Jorge Alberto Manrique indica que ha tenido que cancelar viajes de trabajo porque nadie en el Gobierno Federal les da información sobre la fecha de la ceremonia de entrega. Manrique tiene pospuesto un viaje a Guadalajara porque teme no estar en la ciudad el día que Vicente Fox tenga espacio en su agenda.
?No sé a qué se deba el retraso pero es el reflejo de la poca importancia que se le da a los asuntos culturales. Parece que no hubiera pasado nada, ya no se sabe nada, ni se dice nada. Eso es quitarle importancia al premio y eso no debe suceder?, señala Vargaslugo.
El escritor Carlos Monsiváis, quien fue galardonado en el campo de Lingüística y Literatura, sigue guardando la corbata que utilizará el día que reciba el premio de manos del Ejecutivo y se explica así el retraso de más de 30 días:
?Estoy razonablemente convencido de la justicia del retraso porque sé que este tiempo lo ha ocupado el presidente para proyectar su respuesta iracunda al proyecto de muro del Gobierno estadounidense. Entonces, si en este año no se da la entrega lo justifico porque sé que en última instancia un año es poco tiempo para preparar esa respuesta?.
En contraste con que el 18 de diciembre el Toluca se coronó campeón del Torneo Apertura 2005 del futbol mexicano y 18 días después el presidente Fox los recibió en los Pinos, la coreógrafa Gloria Contreras señala que retrasar durante tanto tiempo la entrega de los Premios Nacionales de Ciencias y Artes es una falta de seriedad para tratar asuntos de mucha importancia.
?La cultura es la que debe tener el primer pensamiento de la gente que organiza un Gobierno. No ha habido una disculpa o alguna razón. No nos han dicho con honestidad: esperen dos o tres semanas. Nos han tenido esperando día con día. Somos seres sociales y tenemos familia y un premio así es para mucha gente, no sólo para los premiados. Mi hijo dicta conferencias alrededor del mundo sobre la cultura mexicana y ha tenido que cancelar algunas, porque quiere estar aquí cuando me entreguen el galardón, pero al mismo tiempo no sabe hasta cuándo será ese día?.
Ni el compositor Luis Herrera de la Fuente, ni las artesanas y artesanos alfareros popolocas de los Reyes Metzontla, Puebla, y tampoco el investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM, Shri Krishna Singh, conocen la fecha de la ceremonia en que les serán entregados los Premios Nacionales. Incluso Krishna, galardonado en la categoría de Ciencias Físico Matemáticas y Naturales, está de viaje y regresa a México hasta mediados de febrero.