Consideran expertos que la situación no es tan alarmante en La Laguna como en otras partes del país.
EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Porque está íntimamente relacionada con el crecimiento, desarrollo y el aprendizaje de la población infantil, la desnutrición es un grave problema de salud pública en México, aunque se considera que en La Laguna todavía no tiene el mismo impacto que en otras regiones, como el sur del país.
Sin embargo, sí es necesario que se comiencen a establecer acciones para atacar los orígenes del problema: la falta de recursos económicos y el difícil acceso de las familias a una alimentación de buena calidad, así como una escasa cultura nutricional, principalmente.
Según el área de Epidemiología de la Jurisdicción Sanitaria Número Dos, la desnutrición incrementa el riesgo de sufrir enfermedades infecciosas, principalmente las diarreicas y de tipo respiratorio, que en algunos casos pueden resultar fatales para los menores si no se atacan a tiempo.
Esto desencadena una especie de círculo sinfín porque un proceso infeccioso da lugar a la descompensación nutricional del organismo, y éste se enfrenta a una situación en la cada vez se vuelve más difícil y complejo encontrar una solución.
Los registros de la dependencia indican que actualmente, cerca de 11 mil niños y niñas están bajo control nutricional, de los cuales menos de un 20 por ciento padecen algún cuadro de desnutrición, en lo que corresponde a los 12 municipios de la Región Lagunera de Durango.
El epidemiólogo, Armando Elías Muñiz Torres manifestó que la captación de estos infantes se realiza a través de los centros de salud dependientes de la Jurisdicción Sanitaria Número Dos, así como de los programas de vacunación que incluyen la dotación de complementos vitamínicos a la población infantil.
Cuando se tiene conocimiento de que un niño o niña tiene un bajo peso, es sometido a una antropometría, que consiste básicamente en medir estatura, peso corporal, perímetros y en función de ello, se realiza una evaluación para calcular el estado nutricional.
La valoración de un infante para calcular su grado nutricional, es competencia del médico que lo atiende, quien debe realizar una historia clínica dentro de la cual también se valoran los antecedentes patológicos y los no patológicos del menor.
En los casos en que se requiere tener mayor información, se ordena la práctica de estudios de laboratorio, cuando la desnutrición no es de tipo calórico sino por otros factores que es necesario analizar.
En este sentido, Muñiz Torres señaló que es de vital importancia la participación de las madres y los padres de familia, quienes a través de los clubes de ayuda mutua reciben información encaminada a prevenir y tratar la desnutrición de sus hijos.
Las causas
La escasez de recursos económicos y el nulo acceso a una alimentación de calidad, son los principales factores a que se atribuye el fenómeno de la desnutrición infantil, sobre todo en las comunidades rurales.
En el ámbito urbano, sin embargo, las causas están más relacionadas con hábitos alimenticios deficientes, que se traducen en un alto consumo de comidas que no tienen ningún aporte nutricional y que sin embargo, son ricos en grasas y azúcares que generan un efecto negativo en el organismo.
Según la Jurisdicción Sanitaria Número Dos, esto se relaciona con la difusión a través de los medios masivos, de alimentos o productos hacia los que se desarrolla un consumismo excesivo.
Esto, aunado a la influencia de los Estados Unidos de optar por la comida rápida, así como las carnes rojas que en el norte de México son altamente consumidas.
En ocasiones, las personas llegan a utilizar dichos productos como sustitutos de una alimentación completa, aunque no se consideran todos los efectos que ocasionan, dando lugar a la obesidad como una contraparte de la desnutrición infantil y la que de acuerdo con los registros epidemiólogos, alcanza niveles alarmantes.
En números
La Jurisdicción Sanitaria Número Dos tiene bajo control nutricional a cerca de 11 mil menores, de los cuales menos de un 20 por ciento presenta desnutrición.
· Del grupo de edad de menos de un año, un 6.12 por ciento tiene algún grado de desnutrición.
· Entre la población mayor de un año de edad y menor de dos, el 11.92 por ciento presenta este problema.
· La misma situación se da en el 13.81 por ciento del grupo de dos a cuatro años que está bajo control de las instituciones de salud.
· De los cinco a los nueve años, el 10.79 por ciento del grupo presenta baja nutrición.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón