HECHOS BOLA
Cuando el entrenador de cualquier equipo deja en la banca a sus refuerzos, es síntoma de que las cosas no le funcionan y ya se hizo bolas; eso sucedió el pasado domingo en el juego contra los Dorados, cuando Rafael Medina se quedó en el banquillo, un jugador, según esto, plurifuncional que trajeron como refuerzo de lujo.
Se ha estado comentando que lo que le falta al equipo es un armador, un creativo, pero el ?Maestro? está hecho bolas, por lo que es necesario y urgente que le pongan un asesor que lo pueda ayudar, porque el equipo está a un paso del infierno.
Varias personas han comentado que hemos estado bastante pesimistas, pero después de cuatro partidos, y todos perdidos, no se ve por dónde se pueda. No por ganarle al América se habrá salido del problema, por favor, hay que tener cautela, ya que no están jugando nada bien.
Si lo que le preocupa al entrenador es su liquidación, hablen con él, ya que él declaró que no renunciará, síntoma de que está esperando su finiquito, por cierto, creo que bastante jugoso. A Eduardo de la Torre no le dieron oportunidad, después del juego contra el Atlas le dieron las gracias, y eso que fue empate. Luego trajeron a un novato y amigo a hacerse cargo de los tres últimos juegos, por cierto bastante mal (llevan en partidos oficiales, cinco perdidos) ya es la hora de tomar decisiones fundamentales para el grupo.
No soy ningún salvador, ni un erudito en la materia. En el equipo lo tienen, y bien pagado por cierto, ya hay que tomar el toro por los cuernos (ayer lo hizo el Morelia). A la voz de ya, porque es tiempo de dejar de estarse haciendo bolas.
Esta columna cambiará sus comentarios a los miércoles, para hacerle frente a los datos frescos del día del juego, y si se requiere, y en El Siglo me dan permiso, podré hacerlo dos días a la semana. Mi correo: ricardodiezb@hotmail.com.
Un saludo a Nadia Sánchez y a Alberto Fadl, en espera de sus comentarios.
