EL UNIVERSAL-AEE
Apatzingan Michoacán.- El Ejército detuvo a cinco integrantes de un grupo armado, entre ellos tres guatemaltecos al que se identificó como presuntos Kaibiles, como parte de la batida policiaca y militar que se inició en búsqueda del comando armado responsable de las 12 decapitaciones y degollamientos ocurridos la semana pasada en Uruapan.
La captura ocurrida tras un operativo realizado por el Ejército en el poblado El Aguaje, obligó a los militares a resguardar la sede en esta ciudad de la Procuraduría General de la República (PGR) ante el temor de un posible ataque para liberar a los detenidos.
Entre el arsenal que se les aseguró a los detenidos se encuentran 12 fusiles de asalto AK-47 y R-15, así como 65 cargadores para estas armas, tres granadas de fragmentación, 2 mil 949 cartuchos útiles, diez cascos blindados, nueve chalecos antibalas, uniformes falsos de la policía, básculas para pesar droga y otros objetos.
Las primeras investigaciones sobre los detenidos, Luis Hernán Castillo Hernández, Manuel Jiménez Quiñones o Baudilio Jiménez Rebolorio, Víctor Manuel López Espinoza, Rafael Peñalosa Santos y Juan Luis Farías Macías, señalan que los tres últimos son guatemaltecos y presuntamente recibieron instrucción militar como Kaibiles.
Este último es un grupo militar adiestrado con tácticas especiales en ese país centroamericano y al que se vincula con matanzas de indígenas y se hizo famoso por su actuar con alta dosis de violencia.
La investigación del caso quedó a cargo del grupo especial de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) que opera aquí desde julio pasado.
De acuerdo con informes de la dependencia, a los cinco detenidos se les decomisó además del arsenal consistente en rifles de asalto y cartuchos, ropa de campaña de la Agencia Federal de Investigación (AFI), similar a la que utilizada por el comando armado que el miércoles pasado irrumpió a balazos en el bar "Sol y Sombra", donde arrojaron cinco cabezas humanas en la pista de baile.
Bajo un impresionante despliegue militar y policiaco, los cinco presunto Kaibiles fueron trasladados a las oficinas de la delegación de la PGR en Morelia, de donde serían enviados a la ciudad de México, a las oficinas centrales de la SIEDO, para continuar con la investigación del caso.
El armamento decomisado, entre los que se encuentran al igual que un vehículo Tsuru con placas PNM-3737, de Michoacán, fueron enviados igualmente a la PGR para quedar bajo resguardo del Ministerio Público Federal, con el fin de rastrear si coincide con el utilizada en ejecuciones y matanzas ocurridas en el estado, pero principalmente con las 12 decapitaciones y degollamientos que ocurrieron en Uruapan.
