EL SIGLO DE TORREÓN
Torreón, Coah.- A Clarita le gusta pasear en pony, Óscar prefiere practicar futbol con sus compañeros, mientras que Luis Gustavo está en la edad de las travesuras y suele despertarse hasta las 11 de la mañana, actividades que desarrolla cualquier infante, sin embargo, ellos son niños especiales que luchan diariamente por cumplir con sus propios objetivos, pues presentan síndrome de Down.
Los tres infantes conviven en el Centro de Desarrollo Psicopedagógico de la Fundación Down de la Laguna, Asociación Civil y en donde suelen acudir para recibir atención y al igual que el resto de la niñez de la Comarca Lagunera, esperan el festejo del Día del Niño pues saben que ese día vendrá un payaso como cada año.
Pero mientras la fecha se acerca, Clara Naomi Álvarez Frayre de seis años, quien cuenta con un cabello tan largo que le llega debajo de la cintura y lo lleva recogido en dos colitas, en monosílabos dice que le gustan los pony y pasear en bicicleta con su papá.
Rufina Frayre Galindo, madre de Clarita, comenta que es tanto el gusto de su hija por tales animales que cuando acuden a la Alameda Zaragoza, suele subirse a los ocho animales que le dan la vuelta al paseo público y sobretodo porque el propietario de los ponys no suele cobrarle.
?Es tremendísima, es bien inquieta, esta en un kinder regular y al principio si fue un poco difícil porque es muy hiperactiva y no se está en un sólo lugar, ella andaba en todo el kinder y en los juegos toda la vida?, detalló Rufina Frayre.
Por su parte Óscar Ezquivel Covarrubias, actualmente cuenta con 13 años de edad, comentó que a él le gusta jugar con globos y balones, además de practicar futbol con sus compañeros Willy y Pablo, quienes también asisten al CEDESI, además de salir con su familia al parque.
Para muestra de su gusto por el balompié, Óscar comenzó a dominar una pelota de color amarillo que se encontró en el interior de la habitación donde suelen ejercitar la actividad motriz de los infantes con síndrome de Down.
Mientras que Luis Gustavo Rodríguez Lujan, quien hace apenas tres semanas cumplió los cuatro años, corrió a subir las escaleras de madera que se utilizan precisamente para ejercitar la coordinación psicomotriz de los niños del Centro de Desarrollo.
En un lapso de minutos comenzó a recorrer la habitación donde se subió a una colchoneta de colores plastificada y donde también se encontraba Clarita, posteriormente jugó con algunas pelotas de plástico, para luego subirse a un resbaladero y caer en una alberca con más balones y continuar jugando.
Maricruz Rodríguez, madre de Luis Gustavo, comentó que es muy travieso en la casa, pero cuando hay convivio familiar suele fungir como el animador de la fiesta, precisamente por la hiperactividad que presenta. Eso sí, a pesar de las travesuras acostumbra comer muy bien y es obediente, aunque se despierta hasta las 11 de la noche.
Como todo infante, los niños con síndrome de Down suelen jugar, reír, correr, pelear, gritar, pero su esfuerzo es diario pues para lograr sus objetivos es necesario esforzarse, situación que suele ser ignorada por la mayoría de la gente y sin considerar que son personas en desarrollo, que posterior a la niñez habrán de continuar con un proceso de desarrollo normal.
Carmen Patricia Murillo de la Torre, directora del CEDESI señaló que ?la expectativa es que ellos se pueden desplegar cualquier forma hacia un desarrollo casi normal, siempre y cuando tengan la atención temprana necesaria, tanto física como en el ámbito de crecimiento emocional y psicológico?.
Destacó que desde hace 15 años que tiene la institución ha sido una lucha de sensibilización para que la sociedad entienda que un niño con síndrome de Down lucha por salir adelante, ?cada día para ellos es un reto de vida, de saltar, de cumplir objetivos que a lo mejor un ser humano regular los cumple y nosotros los pasamos desapercibidos y suponemos que así es el desarrollo de un niño?.
¿Qué es el Síndrome de Down?
El síndrome de Down es una alteración genética ocasionada por la presencia de un cromosoma extra en el par 21.
*Ocurre aproximadamente en uno de cada 700 nacimientos y constituye la causa más común de retraso mental en todo el mundo. Aunque se desconoce el origen de dicha alteración, se sabe que no está relacionado con la nacionalidad, raza, religión o condición socioeconómica.
*Las principales alteraciones en el desarrollo de las personas con síndrome de Down se presentan en las áreas cognitiva y motora, sin embargo, al igual que en el resto de la población, cada quien tiene sus propias capacidades y personalidad que los hace diferentes uno de otros, por lo que resulta indispensable ofrecerles atención y educación especializadas desde el nacimiento, con el fin de promover la adquisición de habilidades y destrezas que favorezcan su desarrollo y contribuyan a mejorar su calidad de vida.
FUENTE: Fundación John Langdon Down
