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Bagdad, irak.- Al menos 30 muertos fueron contabilizados ayer en una nueva jornada de violencia en Irak, entre ellos 15 cadáveres hallados con signos de tortura y cinco soldados de Estados Unidos, cuya cifra de bajas supera ya las 90 este mes de octubre.
Los 15 cadáveres, con señales de disparos y de torturas, fueron encontrados en áreas habitadas por suníes y shiies, informaron fuentes del ministerio iraquí de Interior.
La cifra de fallecidos incluye a seis presuntos rebeldes que perdieron la vida ayer en un enfrentamiento con tropas estadounidenses en la localidad de Hit, 160 kilómetros al noroeste de Bagdad, informó el mando norteamericano.
Esos seis insurgentes formaban parte de un grupo de diez personas que el pasado domingo fue sorprendido por los soldados con armamento pesado, precisa un comunicado.
“Esos hombres abrieron fuego contra nuestras Fuerzas, lo que les obligó a responder. Seis de ellos murieron y los otros cuatro, que resultaron heridos, fueron arrestados”, señala la nota.
Tras el tiroteo, las Fuerzas estadounidenses se incautaron de gran cantidad de armamento pesado, incluyendo lanzadores de morteros y misiles anticarro.
Asimismo, dos civiles murieron y otros ocho resultaron heridos en enfrentamientos entre un grupo armado y habitantes del barrio shii de Al Zafaraniya, en el sureste de Bagdad, según confirmó el oficial de Policía Salam Jatab.
Los combates comenzaron cuando los shiies celebraban el primer día de “Eid el Fitr”, la fiesta que marca el fin del mes de ayuno musulmán de Ramadán, que para los suníes iraquíes comenzó el lunes.
Además, la explosión de un artefacto dejó una persona muerta y otras siete heridas frente a una heladería en el barrio de Al Sadriya, en el centro de la capital, indicó Jatab.
En Kirkuk, 250 kilómetros al norte de la capital, un soldado iraquí falleció y otros siete resultaron heridos en una serie de ataques y explosiones.
Según Burhan Tahan, subdirector de la Policía de la ciudad, los atentados tuvieron como objetivo patrullas policiales y militares que vigilaban la ciudad.
Entretanto, el mando estadounidense informó ayer de la muerte de otros cinco de sus militares en “acciones enemigas” y atentados perpetrados el sábado, el domingo y lunes pasados en Bagdad y la convulsa provincia de Al Anbar, en el oeste de Irak.
Con estas cinco muertes, son ya doce los soldados estadounidenses que han fallecido en Irak desde el sábado y más de 90 en lo que va de mes, el más letal del año para lasa tropas de Washington, según los datos facilitados por el Ejercito norteamericano.
El mando norteamericano anunció que sus Fuerzas prosiguen la búsqueda de un soldado perteneciente a las tropas de la coalición que desapareció en el lunes.
Según un comunicado castrense, el uniformado, perteneciente a la División Bagdad, fue dado por desaparecido el lunes.
En una nota difundida ayer se agrega que el soldado fue secuestrado durante una visita a un pariente suyo en una vivienda situada en el barrio de Al Karrada, ubicada en el centro de la capital.
“Un grupo de encapuchados irrumpió en la casa, lo maniató y lo introdujo a la fuerza en uno de los tres coches en que se trasladaban”, precisa la nota, que no identifica al militar, que trabaja como traductor en un equipo dedicado a la reconstrucción de Irak.
