De nuevos videos y consecuencias.
Todo empezó hace poco más de dos años, con el video que en ese entonces presentara Víctor Trujillo ?caracterizado como Brozo- dentro de su segmento noticioso de las mañanas, y que, casualmente o no, contó con la presencia en vivo del personaje involucrado en la filmación de actos harto cuestionables. Este incidente habría de dar lugar al escándalo que se desataría en los siguientes días, con enorme difusión y graves consecuencias políticas que se extienden hasta nuestros días.
Y recordamos aún que a partir de entonces fueron apareciendo más videos reveladores de conductas inapropiadas de otros personajes del PRD o de asuntos ligados a ese partido político.
Todo ello, mezclado con la detención del empresario Carlos Ahumada en Cuba y los interrogatorios luego de su llegada al país, además de cateos a sus empresas y hasta el cierre del periódico que editaba.
Han pasado dos años y el asunto regresa a las primeras planas de los diarios, ahora con más insidia y carga subrepticia, dado el contexto electoral y el avance de las campañas presidenciales.
Así, ante la imposibilidad de que Carlos Ahumada ofreciera una conferencia de prensa desde la cárcel, éste cambió la estrategia y decidió que fuera justamente su esposa quien diera a conocer nuevos videos, supuestamente comprometedores para el partido del sol azteca. Por lo menos eso se filtró a algunos medios impresos, que dieron difusión a las especulaciones sobre los posibles contenidos de tales grabaciones. Y, finalmente, la anunciada presentación se suspendió luego del atentado contra la esposa y los hijos del empresario preso.
De estos hechos se desprenden varias consideraciones, pues de entrada al posponerse la exhibición de estos videos sería ingenuo considerar que no se difundirán, pues seguramente serán transmitidos por los medios en próxima ocasión, además de que en general ya se sabe cual es su contenido. Otra vez la cantaleta de víctimas y victimarios, dimes y diretes, verdades y mentiras, chantajes y amenazas... Y cuanto más pase el tiempo, más daño se causará.
En todo caso, la intención salta a la vista, o sea, la pretensión de dañar al candidato perredista en vísperas del cierre electoral. Es más, todo esto ocurrió justamente en coincidencia con el mero día del debate, aún cuando bien sabemos, como lo afirma aquella sabia sentencia, que ?en política no existen las coincidencias?.
Por lo tanto, será crucial que la Procuraduría General de Distrito Federal opere hoy más que nunca con gran rapidez y eficiencia a fin de desentrañar tan lamentables hechos.
¿De dónde vino el atentado contra la señora Cecilia Gurza y sus hijos, quién es el autor intelectual y quiénes los operadores? Urge responder a estas preguntas, pues ya el rumor, que se extiende como la humedad, empieza a llenar los vacíos que deja la falta de claridad. La especulación social va desde acusar a los grupos fundamentalistas de izquierda o de derecha, hasta culpar al inefable Carlos Salinas de Gortari e incluso hasta sospechar de un posible montaje Robles-Ahumada.
En cualquier caso, la verdad debe saberse en el plazo más inmediato, deseablemente antes de la celebración de las elecciones del dos de julio, porque de lo contrario quedará en la duda de los electores o en la certeza de la rumorología, donde con frecuencia pagan justos por pecadores.
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