Lima, (EFE).- El amor nunca envejece, y la prueba es el matrimonio peruano formado por José Velit y Olga Núñez, de 103 y 90 años, respectivamente, cuya historia relata en el día de San Valentín, el rotativo local "El Comercio".
Los ancianos, que llevan 67 años de casados, insisten en que el secreto de su unión es la comprensión y no la exigencia, aunque ella aprovechó la entrevista para solicitarle públicamente a su marido que deje de renegar tanto.
Sin embargo, él subrayó que no le ve defectos a su pareja.
"No concibo mi vida sin ella. Todos estos años han sido felices, quizá porque no nos hemos exigido nada", aseguró José Velit.
Si bien la intimidad de los cónyuges ha sido interrumpida por la presencia de una enfermera que duerme con ellos en la misma habitación, el dedicado marido no deja, hasta la fecha, de sorprender a su mujer con regalos de ropa interior sensual, según confesó la veterana.
La católica mujer manifestó que confía en que seguirá al lado de su marido después de la muerte, mientras que él sólo espera no separarse jamás de su compañera de toda la vida.
