NUESTRA REALIDAD
EL SIGLO DE TORREÓN
Se tiene que explicar a los hijos que en la separación no hay víctimas ni victimarios
TORREÓN, COAH.- La separación de los padres puede generar consecuencias psicológicas en los hijos, sobre todo cuando son pequeños. Sin embargo, en muchas ocasiones resulta más benéfico un divorcio llevado en forma sana que una vida de pleitos en el hogar frente a los menores.
El especialista en terapia familiar y de pareja, Jesús Amaya Alcalá, explica que la decisión de divorciarse no debe tomarse en base a los hijos, pues cuando un matrimonio no funciona no debe mantenerse atado únicamente por ellos. No obstante, considera necesario involucrarlos en el proceso, para no dejarles espacio a dudas de si son todavía queridos o no.
?La clave es entender que el divorcio es entre los esposos, pero siguen siendo padres?, manifiesta, ?se divorcian de la pareja pero no de los hijos y aunque ya no exista el vínculo civil, la relación con los hijos debe continuar.
?Se debe explicar a los niños que no hay víctimas ni victimarios, sino que los dos han tomado la decisión porque no pueden congeniar, y que se les haga ver que ellos no tienen la culpa?, agrega el especialista, ?es muy importante hablar con ellos, involucrarlos, que sepan que los problemas entre los papás no tienen nada que ver con ellos.
El psicólogo señala que en múltiples ocasiones las parejas caen en el error de que, ya divorciados, se siguen comportando como si fueran esposos, en lo que respecta a los hijos: ?el trato sigue siendo de esposos, cuando el señor va a visitar a los niños entra a la casa, pasa hasta a la recámara como si todavía fuera su casa, trata a la mujer igual y ella también a él, emocionalmente no se han desprendido aunque ya tienen firmados los papeles de divorcio?.
Amaya Alcalá refiere que esta situación puede generar problemas porque las parejas se vuelven a involucrar o a generar expectativa, con lo que regresa la culpa y la idea de que quizá se precipitaron en la decisión del divorcio. El especialista expone que en estos casos sólo se recicla el problema, al no desprenderse el uno del otro.
?Hay casos en que él llega por los niños y ella se incluye en el paseo, salen como si fueran matrimo-nio y ya no lo son, entonces esto crea confusión y si no trabajaron bien su divorcio van a caer en lo mismo?, indica, ?esto se complica todavía más cuando ya comenzaron a rehacer sus vidas?.
El psicólogo señala que en estos casos incluso se recomienda llevar un menor contacto físico, a fin de entender plenamente que son padres pero ya no esposos.