A Ninfa Deandar y a Ramón Cantú, cuyo gran periódico, “El Mañana” de Nuevo Laredo, fue otra vez víctima de la atroz
narcoviolencia.
Felipe Calderón es simpático y le suena sincero a la gente. Lo mismo que Fox en 2000, aunque menos folklórico que el que es hoy uno de los peores presidentes que haya tenido México. Felipillo ha subido en las encuestas y tiene muy importantes apoyos, como el del IFE, el de Televisa y sobre todo de uno de sus poderosos socios, el dueño del diez por ciento de la TVacciones, Carlos Salinas de Gortari, también propietario del periódico “La Crónica”, que de repente tanto promueven los noticieros de la casa.
Lo dirige Pablo Hiriart, el chileno miembro de la banda de “los cuatro fantásticos” esos famosos ex muchachos que le cargaban el oneroso portafolios al papá Raúl Salinas Lozano, inescrupuloso capo del clan. Y es que se le fue haciendo chirris a Salinas, creador del partido bicéfalo PRIAN, su otro delfín, Roberto Madrazo al que sin embargo no minimizan los perredistas por aquello de que el que sabe hacer trampas electorales magistrales es el PRI.
Y hablando de los cuatro fantásticos, leí un artículo muy interesante de otro de ellos, Raymundo Riva Palacios, también en Televisa hoy, en el que afirma que Zedillo apoya al “Peje”, que incluso ha dicho que es el único con posibilidades reales de ganar y que su propuesto secretario de Gobernación (si llega a Los Pinos), el doctor José Ramón de La Fuente, el único rector que pudo pacificar a la UNAM, es amigo e invento del propio gringo Zedillo.
Nunca creí que los dos ex estuvieran realmente peleados entre sí, ni cuando el procónsul Córdoba Montoya decidió sustituir a Colosio, ni cuando Z metió al bote a Raulito, pero ahora... pues a lo mejor hasta me lo creo.
El exitoso Felipillo está, sin embargo, metiendo patas que encuentran graves incongruencias de su personalidad. Le pesan muchas cosas, lo atan y lo comprometen, a él que parece tan fresco y tan nuevo a ojos de los que apenas los abren a la observación política.
Su sometimiento al Clero y excrecencias tan siniestras como Pro-vida Limón (que aún no da cuenta clara de los 30 millones de pesos que le dio Luis Pazos) y sus nexos con los cristeros, que la Iglesia considera santos, pero entre los que según la justicia humana hubo muchos asesinos seriales, lo obligan a indebidos besamanos con curas de probables manos sucias, pero el muy incongruente candidato del yunquismo a la par asiste a actos alrededor de la figura de Benito Juárez.
Su pasado lejano, cuando era efebo al lado de Carlos Castillo Peraza le hace más daño que bien a Calderón. Fue durante mucho tiempo su asistente y vivió con él seis años en Campeche, haciendo un periódico llamado “El Diario de Campeche”, que imprimía en Mérida “El Diario de Yucatán”. De aquel periodicucho pagado por el presidente priista López Portillo, para acabar con el entonces hombre fuerte del estado sureño, Carlos Sansores Pérez, no queda rastro en ninguna hemeroteca, quizá porque para ambos editores, futuros presidentes de Acción Nacional, Castillo Peraza y Calderón Hinojosa, es una vergüenza haber sido “negros” del priismo.
Y con todo esto a Felipe no le conviene hablar de su querido mentor, porque el hijo además lo acusa de haber traicionado a su padre, Carlos Castillo Peraza. (Ya verá el lector los pormenores de todos estos asuntos en un libro que estoy por publicar cuyo título es precisamente “El PRIAN”, como llamó Luis Sánchez Aguilar q.e.p.d., a la inicua asociación del PRI de Salinas y la parte corrupta de Acción Nacional).
Sin salirnos del tema de la mochería, pavoroso grillete que mantiene a Felipe Calderón de 42 años equiparable a un indecente Torquemada de 100, recordemos lo que recientemente contestó a dos preguntas de Joaquín López Dóriga, una sobre los anticonceptivos y otra sobre los homosexuales. Para agradar al Clero y recibir a cambio apoyo desde el púlpito actual, violador de las leyes mexicanas igual que el Sheraton (go home and take Derbez with you) se lanzó contra los anticonceptivos, es decir contra el derecho constitucional de las parejas mexicanas a planear con eficacia su familia.
¿Eso es lo que para él significa “no mezclo la religión con la política”? El minitorquemada prometió -¿a Rivera Carrera?- que si gana, sacará de la canasta básica “la píldora del día siguiente”. En ese instante, perdió miles de votos, de parejas de pocos recursos que son ¡las de la canasta básica! A los ricos les vale que la quite o no.
Ellos controlan su natalidad como les da la gana y hacen bien, pero lo que no se vale es que tengas que ser rico para estar protegido por el Artículo cuarto constitucional. Lo que dijo El Incongruente, en suma es aparte de una tontería, una discriminación hacia los que menos tienen.
¿Qué no leerá tampoco Felipe? Pues no, los mochos no leen casi nada, ni la Constitución ni a Carlos Fuentes. Una mujer furiosa, que se comunicó cuando escuchó la amenaza de Calderón, tiene una sugerencia para los ayatolas del PAN, que con mucho gusto transmito: ¿Por qué cada uno de los providas, desde Abascal hasta Limón, para demostrar su caridad católica, no adoptan a un niño de la calle y lo llevan a su casa? Seguramente, millones de mujeres sienten la misma rabia contra el candidote, empezando por las madres solteras que hay en su familia.
De haber tomado anticonceptivos, estas señoras no tendrían hoy que aguantar que el purísimo Diego Fernández de Cevallos diga que no le gusta ver pecadores en el poder. No cabe duda, la mochería nubla el entendimiento. Todos los machos mochos del mundo son educados para creer que Eva es la responsable, la culpable, la mala, la censurable, la punible, la inferior.
Hasta la Magdalena, compañera de Jesús, aquel judío que no podía ser célibe a su edad, ha sido tratada de “prostituta”. Y todos los mochos y mochas que sean católicos como Felipe, cristianos de todos tipos, protestantes, judíos, musulmanes o shintoístas, todos son misóginos y culpables, ellos sí, de la discriminación de milenios que sufrimos los seres del género femenino, que desata hasta feminicidios y que el Senado de México, con buenas leyes y muy bonitos sptos de TV, pretende combatir. Ya es hora. En cuanto a lo dicho sobre los homosexuales por el candidato prianista, otro día platicamos de ese asunto.
Por lo pronto, Felipe debe rezar para que le regrese la congruencia en ese y otros tópicos, como el de su última declaración después de reunirse con Fox y Espino del PAN: los Bribiesca, acusados sin bases, tienen derecho a defenderse, dijo Felipe, aunque no lo tenga que hacer el PAN. No es “tapadoring” el candidato, pero ya no se deslinda tan vigorosamente de la lamentable familia presidencial que pretende reemplazar en Los Pinos. Si eso es al principio...
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