Gracias amigo mío, por darme el gran placer de ser tu amigo, tu compañero, tu amo, tu hermano, tu padre. Ha sido una experiencia maravillosa conocerte, escuchar tus ladridos, ver tus destrozos, tus juegos con la cola, y tu interactuar con el resto de tu familia. Gracias amigo, por tu compañía, porque disfrutamos y compartimos momentos agradables. Aunque yo no esté cerca de ti, siento tus vibraciones de ternura, escucho a lo lejos tus ladridos que me trasmiten tu dulzura, tu paz, tu confianza, tu gran respeto hacia mí. Gracias amigo del alma por haber regalado lo más valioso de tu tiempo, por haberme saludado siempre que me veías, por haber estado al pendiente de mí, porque siempre me diste tu amor desinteresado sin esperar nada a cambio. A Dios doy gracias, por haberte puesto en mi camino. Diosito mío, cuida por siempre a mi perro ya que él me dio su sincera y desinteresada amistad.
A todos los perros que han iluminado nuestro camino y ahora no se encuentran con nosotros les doy mi más sincero agradecimiento porque iluminaron nuestras vidas. A quienes aún cuentan con una mascota les pido que por favor la valoren y la cuiden ya que es parte fundamental de nuestra familia.
Wolfschauze@aol.com