Muchos pobladores de la Miguel de la Madrid se ?cuelgan? de la red de energía eléctrica.
El Siglo de Torreón
Gómez Palacio, Dgo.- La presencia de cables de alta tensión sobre los techos de sus viviendas, es lo que mantiene intranquilas a muchas de las familias de la colonia Miguel de la Madrid Hurtado, donde el paso de estas líneas y el permanecer ?colgados? de ellas ya ha dejado estragos.
Incluso, hay quienes a pesar de no estar directamente conectados a los cables enfrentan el peligro de perder su patrimonio, como Carolina Hernández, quien vive en el número 133 de la calle Primavera del sector dos y quien ha sido testigo de cómo el fuego que desprenden las líneas de energía eléctrica cuando caen, ha consumido la ropa tendida de su vecina, Consuelo de la Torre.
Y es que según explica, hay una serie de seis cables de alta tensión que atraviesan sobre esta casa, los que están sujetos a un endeble poste de madera que pareciera que se viene abajo cada vez que el viento sopla con intensidad.
?Los que sí se han caído son los cables, sucedió una vez que acababa de entrar a la casa cuando escuché que chicotearon; por la ventana vi como consumieron rápidamente toda la ropa que había dejado tendida?, señala Consuelo.
Aunque esta vivienda no está ?colgada? de las líneas, sino que ya tiene la instalación que amerita el contrato de luz, está bajo una amenaza latente de que en cualquier momento los cables caigan y generen pérdidas, tanto materiales como humanas.
Considerando ese riesgo, las vecinas han recurrido a la Comisión Federal de Electricidad para solicitarle que mejore las instalaciones o reubique el tendido de alta tensión, pero la única respuesta que han encontrado es que las familias fueron quienes se asentaron ahí, cuando las líneas de energía eléctrica ya se habían instalado y que por esta razón, son ellos quienes deben considerar la necesidad de reubicarse a otro sitio.
?El problema es que no tenemos la posibilidad de comprar un terreno y construir otra casa, de lo contrario ya no estaríamos aquí... a veces ni dormimos por el miedo de que los cables caigan encima de nuestras viviendas cuando hace aire?, señala Carolina.
Estos incidentes también han puesto de manifiesto otras necesidades, como la de contar con aparatos telefónicos de uso público, pues cuando los cables se han caído las amas de casa tienen que desplazarse hasta el minisuper que está sobre la carretera a Jabonoso, a unos 500 metros de distancia, para pedir que los trabajadores de la CFE vayan a levantarlos.
Un riesgo similar es para las decenas de familias que aún permanecen ?colgadas? de los cables de la CFE, las que ya han sufrido pérdidas por los incendios ocasionados al disponer de esta manera de la energía eléctrica y que incluso demandan que se regularice la prestación del servicio.
Una de las tres afectadas por el último incendio registrado en ese sector, el sábado 18 de marzo, explica que ha sido difícil superar este hecho, pese a toda la ayuda que recibió desde el primer momento por parte de vecinos y las autoridades municipales.
En la presidencia, refiere, le aseguraron que estarían por llevarle material de construcción para levantar un cuarto en el terreno que ocupaba el jacal que se perdió, aunque la intención es tener instalaciones de luz seguras para que no se repita la historia.
Carentes de servicios
El sector dos de la colonia Miguel de la Madrid Hurtado tiene necesidades generalizadas de redes de drenaje, pavimentación y alumbrado público, además de suficiente presión en las tuberías de agua potable.
Las familias que habitan ahí desconocen porqué gran parte de los otros dos sectores cuentan con el primero de dichos servicios, a diferencia de ellos quienes han sido insistentes ante las administraciones municipales sin tener resultados, pese a que se han mostrado dispuestos a cooperar con recursos para que estas obras se lleven a cabo.
Gloria Leticia Durán García, quien vive sobre la calle Verano, recuerda que hace algunas semanas recibió la invitación de una lideresa del sector tres para que plasmara su firma en una lista que supuestamente, serviría para gestionar al municipio la introducción del drenaje.
?Después supimos que la intención no era esa, sino que las firmas las iban a utilizar para reclamar que se le quitara el terreno a alguien que no lo está aprovechando, lo cual me pareció un abuso?.
En esta afirmación coincide Patricia Zamora, quien en definitiva se negó a firmar cuando supo que se pretendía retirarle el terreno al dueño de un corralón cercano.
La escasez de agua es evidente, pues gran parte de los vecinos han excavado hasta un metro de profundidad y han conectado llaves a la línea de conducción del agua para obtener un poco más de líquido y realizar los quehaceres diarios.
Sobre la calle Del Castillo, María del Socorro Estrada da las indicaciones finales a su hijo sobre cómo colocar la llave para extraer el agua, ?esto es necesario porque el agua no sube al fregadero o la regadera?.
Escasez
?Tenemos que hacer pozos para obtener el agua, hay muy poca presión y ésta no sube a la tubería?.
María del Socorro Estrada,
Vecina de la colonia Miguel de la Madrid
Firmas
?Vinieron a levantar firmas diciendo que era para solicitar drenaje, pero no se utilizaron en esto?.
Patricia Zamora,
Vecina de la colonia Miguel de la Madrid
