EL SIGLO DE TORREÓN
SAN PEDRO, COAH.- Debido al calor y ante la proximidad de la temporada de lluvias, existe el riesgo de que se presenten brotes de garrapatas, ante lo cual resulta indispensable asumir algunas recomendaciones básicas para prevenir las picaduras de estos parásitos, causantes de la fiebre manchada.
Paras ello, dijo el doctor Jesús Ignacio Aguilar Carranco, director del Hospital General de la Secretaría de Salud (Ssa), se impartieron varias pláticas al personal de salud con el objeto de que refuercen sus conocimientos sobre esta enfermedad transmitida por la garrapata al ser humano.
El padecimiento se registra con mayor frecuencia en comunidades del medio rural, favorecido por la carencia de pavimento o banquetas; ejidos que han registrado casos en años anteriores que constituyen un foco de atención para la tarea preventiva.
La fiebre manchada se denomina así por la aparición de manchas en la piel, ocasionadas por el proceso de coagulación vascular que ocasiona la picadura de las garrapatas que son portadoras de la infección de las rikettsias.
Por desgracia, cuando se solicita atención médica a quien tuvo una picadura de garrapata, se hace cuando ya se presentó este proceso de coagulación vascular diseminada, lo que es indicativo de que la septicemia (proceso infeccioso) ya registra un avance muy marcado.
Ante tal situación, las autoridades sanitarias consideraron importante que la población adquiera una serie de medidas preventivas, como la aplicación de insecticidas en los sitios donde permanecen las mascotas; procurar a éstas el aseo constante y prevenir que los menores jueguen o convivan con animales que pudieran estar infestados de dichos parásitos.
Cuando existe la presunción de que alguien tuvo una picadura, la recomendación es revisar el cuerpo en busca de la garrapata, además de someterlo a un tratamiento prescrito por el médico a base de antibióticos, aun cuando no presente síntomas.
Antecedentes
Las autoridades sanitarias recomiendan a la población extremar precauciones con las mascotas o perros callejeros, ante el posible brote de garrapatas, cuyas picaduras pueden ocasionar la fiebre manchada.
*Cada año se notifica un promedio de dos casos del padecimiento, generalmente en menores de edad, por ser éstos quienes tienen una convivencia más cercana con sus mascotas.
*La fiebre manchada tiene una tasa de letalidad mayor del 60 por ciento, por lo que más de la mitad de los enfermos fallece.
*Se considera una enfermedad propia del medio rural.
*La picadura de garrapata generalmente no causa dolor, ante lo que es necesario revisar el cuerpo cuando existe la presunción de ello.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón