El Universal-AEE
MÉXICO, DF.- Kika Edgar llegó ?molida? a su último ensayo general de Cabaret. Pidió un refresco de cola y diez minutos para descansar.
El director Felipe Fernández del Paso aprovechó el receso para modificar el primer número de Bruno Bichir, y Carlos de la Mota ?peleó? con un bailarín por ?robarle? sus escenas.
Kika Edgar regresó al escenario arrastrando el cuerpo, con la mirada triste y sus delgados brazos colgando sin fuerza. Estuvo dos días en una playa haciendo fotos para una prestigiada revista, lo cual le dejó apenas dos días para ensayar antes de su debut como Sally Bowles en Cabaret.
Con Kika y el resto del elenco en el escenario, la orquesta comenzó los acordes del número abridor Kit Kat Klub. Micrófono en mano, Fernández del Paso corrigió errores de ubicación de Bichir y de dos integrantes del ballet que también debutarán este viernes.
Entonces tocó la entrada de Kika. En ese momento, la misma que apenas diez minutos antes había pedido un refresco para quitarse el cansancio, adquirió una fuerza que Fernández del Paso describió como ?un huracán?.
Con voz potente y actitud muy teatral, la actriz que sustituirá a Itatí Cantoral, levantó de su asiento al resto del elenco que miraba el ensayo desde las butacas del teatro Insurgentes. Carlos de la Mota dejó de pelear con el actor, Bichir aplaudió con entusiasmo y el director sonrió complacido con su nueva adquisición.
?Esta es mi cuarta Sally Bowles. No podría decir cuál es la mejor, pero Kika le da un aire dramático impresionante, al mismo tiempo que una sensualidad perturbadora?.
En opinión del director, el rostro ingenuo de su nueva protagonistas contrasta con la sensualidad que proyecta a la hora del baile y los gestos dramáticos en las escenas trágicas. Cuando terminó el número musical, Edgar volvió a notarse con el cuerpo ?molido? y el rostro cansado. El director le concedió otro receso de diez minutos, Carlos de la Mota comenzó a pelear de nuevo con su ?actor enemigo? y la orquesta aprovechó para afinar los instrumentos.
Todavía le faltaban dos números a Kika Edgar; es decir, que probablemente también le faltaban dos refrescos y dos recesos. Pero Fernández del Paso está feliz con ella: ?Es una Sally de muchos contrastes, muy juguetona. Con Itatí Cantoral descubrí el personaje, con Tiaré Scanda lo perfeccioné, con Fernanda Castillo indagamos cosas nuevas, y ahora con Kika Edgar finalmente le puedo comunicar todo ese bagaje?. Y tiene razón cuando dice: ?Es Kika supersexy y superinocente?.
