Levantado finalmente el brazo por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación al vencedor de la pelea por la Presidencia de la República, éste se encontrará en la mesa un sobre con 10 sellos de urgente y las siglas S.O.S. en letras gigantes, cuyo remitente es el campo mexicano
Entregado originalmente a los candidatos, el texto plantea cinco grandes retos: reducir la pobreza y la desigualdad; alimentar en 25 años a más de 130 millones de mexicanos; mantener niveles adecuados de producción interna para evitar mayor vulnerabilidad; mejorar la competitividad, y preservar los recursos naturales, con énfasis en el agua. El punto de arranque es dramático: en el medio rural del país habitan 22.6 millones de pobres, 31.5 por ciento de los cuales, especialmente niños menores de cinco años, presentan elevados niveles de desnutrición; un tercio de los jefes de hogar es analfabeta; dos millones no hablan español; el promedio de edad de los productores es de 52 años?
Y más: la escala de producción es reducida ante la incertidumbre en la tenencia de la tierra; 60% de las unidades es menor de dos hectáreas; existen 21 entidades federativas con riesgo de conflictos agrarios, en la mayoría de los casos
entre pequeños productores y
ejidatarios?
Y si le seguimos, al campo llega sólo 0.7 por ciento de la inversión fija nacional, equivalente a 3.7 por ciento del Producto Bruto Sectorial, mientras en países desarrollados alcanza 32 por ciento, y el financiamiento es escaso y de corto plazo, alcanzando apenas a siete por ciento del valor de la producción, frente a 85 por ciento de Estados Unidos.
Adicionalmente, mientras en Estados Unidos el gobierno le otorga apoyos directos a los productores en un promedio de 14 mil dólares per cápita, en México con trabajos se arañan los mil.
Desde otro ángulo, la productividad por trabajador alcanza apenas un promedio de mil 800 dólares anuales, en tanto en los países desarrollados llega a 50 mil, mientras el valor agregado es de 1.7 veces el valor de la producción, frente a los 5.3 de Estados Unidos, en un escenario en que existen sólo 38 tractores por cada mil trabajadores agrícolas, contra los mil 619 del país del norte.
Ahora que en contraparte, de acuerdo con el documento suscrito por el Consejo Nacional Agropecuario bajo el sugestivo nombre de ?Sembrando el futuro: un diez para el campo?, el país cuenta con un elevado potencial.
Por ejemplo, su diversidad biológica que lo ubica como uno de los 12 países ?megadiversos? del planeta; su riqueza de recursos naturales; sus 11 mil 122 kilómetros de litoral; su diversidad de regiones agroecológicas; su cercanía al mercado de Estados Unidos; la posibilidad de desarrollo de bioenergéticos?
Aprovecharlos, empero, reclama una sacudida integral del país, empezando por ofrecer certidumbre a todos los actores ya en la tenencia de la tierra; en el aprovechamiento del agua; en las políticas públicas,
en la protección de la propiedad intelectual?
El pliego petitorio habla concretamente de no permitir que se reabra el reparto agrario ante la nula disponibilidad de tierras; de garantizar la libertad de ejidatarios y comuneros respecto del tipo de tenencia que deseen, y aún limitar la competencia de los Tribunales Agrarios a casos anteriores a su creación, ocurrida ésta en 1992.
Desde otro ángulo se reclaman políticas macroeconómicas que permitan el crecimiento económico y la salud en las finanzas públicas, concretando las reformas estructurales; avanzando en la mejora regulatoria; acotando la inflación a una tasa máxima anual de cuatro por ciento, y promoviendo tasas de interés competitivas y un tipo de cambio estable, realista y competitivo.
El organismo que aglutina a los productores de 70 por ciento de las ramas agrícolas; de 80 por ciento de las pecuarias, y de 100 por ciento de las agroindustriales, plantea además un mayor impulso a la coinversión productiva; a la multifuncionalidad del campo con
actividades alternativas; al
aprovechamiento de las ventajas comparativas?
La catarata habla en paralelo de mantener el actual régimen fiscal, ?en reconocimiento a sus condiciones inherentes y riesgos?, aun cuando se debe establecer un esquema adicional que promueva la reinversión de las utilidades y agilizar la devolución de IVA en un máximo de 15 días.
Adicionalmente, se pide establecer estímulos fiscales para las empresas de cualquier tipo que se establezca en el ámbito rural y para aquellas que produzcan energías limpias; ampliar la infraestructura básica, incluyendo la portuaria, carretera, hidráulica, rastros TIF,
centros de acopio, redes de frío y laboratorios?
¿Un 10 para el campo?
Balance general
Una pregunta recorre México: ¿de dónde salieron los 136 millones de pesos que se gastó el Consejo Coordinador Empresarial en la campaña de apoyo al candidato panista a la Presidencia de la República, Felipe Calderón Hinojosa, disfrazada de divulgación de las ?tesis empresariales??
El hecho es que el organismo cúpula vive tronándose los dedos para salir tablas con sus gastos
ante la inconsistencia de sus organismos para cubrir las cuotas que les corresponden.
¿No se la pasa amenazando una y otra vez a la Canacintra de expulsión por morosidad? ¿No está obligado una y otra vez a solicitarle aportaciones extraordinarias al poderoso Consejo Mexicano de Hombres de Negocios, lo que lo convierte en el factotum de cada elección?
La cifra, por cierto, salió del recuento que realiza día a día el IBOPE, y se proyectó sobre las tarifas que ofrece como tabulador el Instituto Federal Electoral.
Ahora que el señalamiento de la coalición Por el Bien de Todos hacia la empresa Jumex fue por inducir subliminalmente el voto hacia la causa de Acción Nacional en su campaña de promoción de éste, al proyectarla sobre un fondo azul, en tanto en el caso de Sabritas, filial de la multinacional estadounidense Pepsico, se hablaba abiertamente de votar por el candidato de ?las manos limpias?
La primera, bajo la misma prospección, se gastó 13 millones 143 mil 476 pesos; la segunda 16 millones 496 mil 800.
El artículo 41 de la Ley de Procedimientos Electorales prohíbe a empresas y organismos privados hacer promoción del voto.
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Responsable, en principio, del estudio de factibilidad ordenado por la Secretaría de Relaciones Exteriores, el Banco Interamericano de Desarrollo está elaborando las bases de licitación para el proyecto estelar del declinante gobierno foxista: el Corredor del Istmo que correrá de Coatzacoalcos a Salina Cruz, es decir, de Veracruz a Oaxaca, conectando los océanos Atlántico y Pacífico.
El problema es que pese a la presión ejercida para abrir el escenario antes de la llegada del nuevo gobierno, quien heredaría el compromiso, se estima que en el mejor de los escenarios el proceso se iniciaría en enero de 2007.
De hecho, la responsabilidad del BID es entregar ese mes las características que se reclamarían a las firmas que participaran en la aventura de ponerle tienda de enfrente al Canal de Panamá, vía la reestructuración del ferrocarril del istmo de Tehuantepec, quien llevaría la carga de los barcos que atraquen en uno y otro puertos.
El corredor de 302 kilómetros reclama una inversión de mil 500 millones de dólares a ejercerse en 12 años, aunque la intención es que funcione a finales de 2008.
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El viernes pasado se inició la tarea de la Comisión de escrutinio de la Confederación de Cámaras Industriales para determinar quién de los tres postulados concita la mayor simpatía por parte de éstas para alcanzar la presidencia del
organismo.
El sucesor de León Halkin saldrá de entre el industrial textilero Mayer Zaga; el de la confección, Salomón Presburger, y el de la construcción, Ismael Plascencia.
En la carambola se decidirá si el organismo le otorga su voto al propio Halkin para pelear a su vez la presidencia del Consejo Coordinador Empresarial.
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