El Siglo de Torreón
SAN PEDRO, COAH.- El desabasto de agua se ha agudizado en algunas comunidades rurales, debido a la falta del mantenimiento en la tubería, motivo por el cual el municipio les dota del vital líquido enviando pipas, pero algunas personas lucran en su beneficio.
Lo anterior fue denunciado por Silvia Sustaita y un grupo de vecinos dela ejido San Esteban de este municipio, quienes acudieron a la Presidencia Municipal para manifestar su inconformidad debido a que el nuevo titular del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento, Humberto Núñez Sifuentes, no ha atendido sus demandas.
Señalaron que en los últimos tres años, no carecieron del vital elemento, sin embargo esto se debió a que un período atrás, el alcalde en turno, Francisco Bilbao Marcos, invirtió una buena suma de dinero para rehabilitar la red de tubería, sin embargo, durante la pasada administración no se le dio el mantenimiento adecuado.
Hundidos en el abandono, los habitantes de esta comunidad rural sampetrina, ya no confían en las autoridades pues ?sólo vienen cuando andan en campaña, pero luego se olvidan de uno?, manifestó Silvia Sustaita. Señalan que servicio de agua sí tienen, pero nada ganan pues de las tomas sólo sale aire y sin embargo se está pagando el recibo que puntualmente llega cada mes, aseguraron los quejosos, quienes repudiaron la actitud asumida por el gerente del Simas, quien no se ha dignado a resolverles el problema.
Expresaron que el Municipio envía pipas con agua para repartirlos entre lo habitantes de San esteban, pero sólo les surten de dos tanques de 200 litros a razón de tres pesos cada uno y si quieren un tercero o más, se los cobran a seis pesos cada uno. ?De nada sirve que estemos pagando por un servicio que no tenemos?, afirmaron molestos.
Muchos vienen hasta San Pedro, pero además de tener que pagar por el líquido hacen un gasto adicional de gasolina, por lo que resulta contraproducente, dijeron.
Negocio familiar
Los habitantes del ejido San Esteban, denunciaron además el negocio que está haciendo la familia de Alicia Soto, pues las pipas primero llegan a su domicilio donde le surten de agua pero enseguida el hijo de ella la vende al resto de la comunidad.
?Mientras el municipio nos dota de agua a razón de tres pesos el tanque de 200 litros, el hijo de Alicia los vende a 20 pesos cada uno, lo que resulta una injusticia? dijeron.
