?La globalización de la producción y la inversión amenaza al estado de bienestar,
que es un elemento clave de las políticas del estado-nación tanto en el medio
siglo pasado, pero que probablemente es el componente básico de su legitimidad
en los estados industrializados?
Manuel Castells Sociólogo
La globalización condena a la economía a privilegiar políticas macroeconómicas restrictivas y elevadas tasas de interés internas para contener la demanda y las presiones sobre los precios y el sector externo, para atraer recursos del exterior e incrementar las reservas internacionales para estabilizar el tipo de cambio en términos nominales, control de la inflación y encarar las eventuales fluctuaciones que pueden derivarse de la interrogación de los mercados financieros internacionales.
Por ello en nuestro país, las políticas dirigidas a favorecer los intereses de capital financiero, la apertura comercial, la disciplina fiscal y las adecuadas tasas de interés, actúan en detrimento de la empresa nacional que cada día adolece de niveles óptimos de productividad para hacer frente a la competencia internacional y también propicia nuestra dependencia de capitales del exterior que son oxígeno para nuestra estabilidad financiera.
Sin embargo a pesar del optimismo del Gobierno hemos insistido en esta columna en la diferencia de precisar lo favorable en las variables financieras de nuestro país y la situación económica de las empresas y el poco beneficio que permea hacia la sociedad, ya que las decisiones políticas y legislativas van muy detrás de los actuales y crecientes desarrollos financieros, tecnológicos de la industria y del comercio que a una velocidad insospechable intervienen en todos los mercados.
Continuamos criticando lo que el pasado representó para el éxito del presente la falta de acuerdos entre el Ejecutivo y el Legislativo nos está llevando a un estancamiento económico muy lamentable; por ello el descenso que registró nuestro país en la última información económica del Banco Mundial y que incluso ya ratificó también el Fondo Monetario Internacional incluso mencionando que no hemos sabido aprovechar adecuadamente la ventaja de los precios tan altos del petróleo al frenar inversiones en infraestructura, apoyo a las empresas y otras medidas que solo nosotros insistimos en justificar.
Estamos próximos a iniciar la recta final en la carrera Presidencial, en mi opinión seguimos cultivando un estilo de política atrasada y que nada tiene que ver con una verdadera expresión democrática, ya que lo absurdo de nuestra inutilidad política no muestra por parte de ninguno de los candidatos en mi opinión, un verdadero modelo de desarrollo que permita equilibrar los factores centrales de un desarrollo económico empresarial y social en forma armónica y que favorezca la convivencia civilizada.
Los últimos acontecimientos de sangre por el conflicto minero, la violencia del crimen organizado que se encuentra sin control en varias regiones del país y la simple claridad en el Estado de Derecho y sobre todo en la aplicación correcta de la ley nos exhibe como un país lleno de indecisiones y de falta de liderazgo en todos los sectores lo cuál para cualquier inversionista extranjero desaniman y ven trabas de todo tipo para arriesgar su capital; es necesario como sociedad exigir un verdadero respeto a la libertad, que los contendientes políticos y sus partidos sean verdaderamente responsables en la contienda que se está desarrollando y al estado que cumpla con su función rectora en forma responsable aplicando la ley en forma equitativa y con castigo a quienes estén infringiéndola, pero con la previsión y sensibilidad de evitar actos autoritarios que están poniendo en riesgo de romper el orden y el equilibrio social y económico para evitar la pérdida de confianza de toda la sociedad y se nos pueda llevar de nuevo a inestabilidades no deseables, pero que pueda presentarse en forma imprevista.