Buscan científicos estudiar la atmósfera de Venus y buscar antecedentes sobre el fenómeno invernadero en la Tierra .
Darmstadt (Alemania), (EFE).- Tras una compleja maniobra, la nave europea Venus Express entró hoy con éxito en la órbita del planeta más cercano a la Tierra con el fin de estudiar su enigmática atmósfera y, sobre todo, el efecto invernadero.
Según informó la Agencia Espacial Europea (ESA) en su centro de control en Darmstadt (oeste de Alemania), la maniobra comenzó con el encendido del motor principal de la nave a las 07.17 horas GMT.
Después de un viaje de cinco meses y 400 millones de kilómetros por el Sistema Solar, tras su lanzamiento el 9 de noviembre del año pasado, Venus Express alcanzó su objetivo.
Una vez encendido el motor principal, los ingenieros de la ESA giraron Venus Express en dirección contraria a Venus con el fin de que la sonda comenzara a frenar un 15 por ciento su velocidad en ese momento en relación con el planeta y pudiera ser capturada por su gravedad.
El satélite europeo pasó de llevar una velocidad de 29,000 kilómetros por hora al comienzo de la maniobra a viajar a 24,650 kilómetros por hora en el momento en que se introdujo en la órbita de Venus, explicó a EFE el director de operaciones de ciencia de la ESA en Holanda, Detlef Koschny.
Posteriormente, a las 07.45 horas GMT la nave atravesó una fase de ocultación durante diez minutos en los que quedó oculta por Venus y no tuvo contacto con la Tierra.
A continuación, a las 08.07 horas GMT, 50 minutos después de ser encendido, se apagó el motor de la sonda y fue entonces cuando los científicos e ingenieros reunidos en el centro de control de la ESA rompieron en aplausos, abrazos y gritos de alegría al poder verificar que Venus Express había conseguido entrar en la órbita de Venus.
En esta crucial maniobra, Venus Express utilizó el 90 por ciento de los 570 kilos de combustible que lleva a bordo, si bien se pudo ahorrar parte del combustible previsto para la operación, según la ESA, por lo que la misión podría prolongarse hasta cuatro años adicionales a los dos que ya estaban contemplados inicialmente.
Finalizada la entrada en órbita, la nave fue reorientada con el fin de que una de sus antenas principales quedara posicionada en dirección a la Tierra para poder establecer comunicación con el centro de control.
La antena de espacio exterior de 70 metros que la agencia estadounidense NASA posee en Madrid asistió en todo momento a los europeos en esta compleja operación, llamada Inserción en Orbita de Venus.
El director general de la ESA, Jean-Jacques Dordain, dijo en una rueda de prensa que han sido "capturados por Venus" y mostró su orgullo por el éxito de la difícil y arriesgada maniobra de esta misión, cuyo coste alcanza los 220 millones de euros (264 millones de dólares).
Dordain añadió: "Teníamos una nave, ahora tenemos una misión, que empezará a funcionar mañana con la puesta en marcha de los instrumentos" que Venus Express lleva a bordo, por lo que se podrá contar con las primeras imágenes de este desconocido planeta a partir del 13 de abril.
La entrada de la sonda en la órbita de Venus señaló la llegada de la primera misión de la ESA a este planeta, uno de los más enigmáticos del Sistema Solar pese a que EU y Rusia lo han visitado en unas 20 ocasiones desde 1964.
Venus, que debe su nombre a la diosa romana del amor y la belleza, es el objeto celeste más brillante del Sistema Solar, después del Sol y la Luna, y la temperatura de su superficie alcanza los 465 grados centígrados.
Es de gran interés para los científicos el estudio de la atmósfera de Venus, compuesta principalmente de dióxido de carbono, sujeta a presiones muy fuertes y a un elevadísimo efecto invernadero, y de su actividad volcánica.
Por ello las informaciones que aporte la sonda pueden contribuir a explicar la formación de este fenómeno invernadero en la Tierra, así como los procesos climáticos de largo plazo.
Venus gira muy lentamente sobre su eje y cumple una vuelta completa, lo que equivale a un día venusiano, en 243 días terrestres.
Para recopilar información, Venus Express está equipada con siete instrumentos científicos como espectrómetros, captadores de imágenes y un analizador de plasma, y seguirá a Venus en una órbita muy elíptica a una altitud máxima de 66.000 kilómetros y mínima de 250 kilómetros por encima de los polos.
Todos los datos científicos que recopile la sonda Venus Express durante sus, al menos, 3 años de operaciones, tras la prolongación confirmada hoy, acabarán a partir de 2007 en el Centro de Astronomía Espacial de la ESA en Villafranca (Madrid), donde se almacenan todos los datos científicos de las misiones de ciencia espacial y exploración planetaria.
