Mañana votarán para elegir a uno de los cinco candidatos, que se convertirá en el séptimo director de la agencia de la ONU.
EFE
Ginebra.- El secretario de Salud de México, Julio Frenk, aseguró hoy sentirse "satisfecho" con la entrevista personal ante el Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), encargado de elegir a un candidato para dirigir la agencia de la ONU hasta 2011, y apuntó que "no estamos pensando en perder".
"Las preguntas del Consejo han sido muy inteligentes y yo me siento satisfecho con mi presentación", aunque "lo importante es cómo la hayan percibido ellos", declaró el candidato, quien rechazó pronunciarse sobre sus posibilidades de ganar, porque "esa es una decisión que sólo depende del Consejo".
Tras la eliminación el lunes de seis candidatos, Frenk compite con la ministra de Sanidad de España, Elena Salgado, la china Margaret Chan, hasta ahora subdirectora general de la OMS en la lucha contra enfermedades infecciosas; el japonés Shigeru Omi, director regional para el Pacífico Occidental, y el kuwaití Kazem Behbehani, ex subdirector de Relaciones Externas de la organización.
Todos ellos afrontan hoy la última fase de selección del sucesor del surcoreano Lee Jong-wook, que murió repentinamente a mitad de mandato el pasado 22 de mayo, y todos están siendo entrevistados individualmente por el Consejo de la OMS.
Frenk fue el tercer candidato en ser entrevistado (y el tercero más votado en la primera ronda de selección), por detrás de los de España y Japón, y el último del turno de la mañana, ya que por la tarde se preguntará al kuwaití y a la china.
Durante la exposición de treinta minutos que debe hacer cada candidato ante el Consejo, Frenk defendió los tres pilares en los que basa su programa y que ofrecen diferentes perspectivas de la salud: como "cimiento para un desarrollo equitativo y sostenible", como "fuente de seguridad mundial" y como "modelo para la reforma del sistema de la ONU y del multilateral en su conjunto".
Frenk explicó que en el turno de preguntas, de otra media hora, le dio tiempo a contestar "cerca de diez cuestiones, todas ellas excelentes" y entre las que hubo algunas relacionada con el tabaco, ámbito en el que ha sido criticado por los acuerdos firmados con la industria en su país.
Fuentes diplomáticas dijeron que se le preguntó al respecto y que aprovechó para mencionar su "firme compromiso en la lucha contra el tabaco", para lo que recordó que México fue el primer país de América en ratificar el Convenio para el Control del Tabaquismo.
Además, Frenk detalló que se le cuestionó sobre los derechos de la propiedad intelectual en la industria farmacéutica, a lo que, según fuentes diplomáticas, contestó que es posible encontrar un equilibrio que permita incentivar la investigación y, a la vez, garantizar el acceso a los medicamentos por parte de los colectivos o pueblos más desfavorecidos.
El embajador de México ante Naciones Unidas en Ginebra, Luis Alfonso de Alba, dijo que Frenk, el único candidato que cuenta con la doble experiencia de haber sido responsable de Sanidad de su país y un alto responsable de la OMS, "hizo lo que acostumbra a hacer: una exposición brillante, demostrando un gran dominio en el terreno técnico y político".
Según De Alba, una de las principales valías del mexicano es su experiencia en lograr consensos, ya que durante los seis años como secretario de Salud ha coordinado la labor de los responsables en la materia de los 32 estados del país.
El Consejo está formado por siete miembros africanos (Kenia, Lesoto, Liberia, Madagascar, Mali, Namibia y Ruanda), seis americanos (Bolivia, Brasil, El Salvador, EU, Jamaica y México) y tres de Asia suroriental (Bután, Sri Lanka y Tailandia).
Además, hay ocho de Europa (Azerbaiyán, Dinamarca, Eslovenia, Letonia, Luxemburgo, Portugal, Rumanía y Turquía), cinco del Mediterráneo Oriental (Afganistán, Bahrein, Yibuti, Irak y Libia) y tres del Pacífico Occidental (Australia, China y Japón)
Todos ellos votarán mañana para elegir a uno de los cinco candidatos, que se convertirá en el séptimo director general de la agencia sanitaria de la ONU, si cuenta con el apoyo de dos tercios de los 193 países de la organización reunidos el próximo jueves en Ginebra.