EFE
México, DF.- Así como algunos son adictos a las drogas, el juego o el tabaco, otros lo son a pasar horas ?pegados? a Internet, un fenómeno que un creciente grupo de especialistas de Estados Unidos considera un ?problema siquiátrico?.
La enfermiza afición a la Red ha sido ya diagnosticada como Desorden Adictivo a Internet (DAI), y se estima que entre seis y diez por ciento de los aproximadamente 189 millones de usuarios en Estados Unidos lo padecen. No hay registro de una cifra para México o América Latina.
La también llamada Internet-dependencia o Internet-compulsión, se detecta por comportamientos que interfieren en la vida normal de una persona, causando estrés severo a su familia, amigos y trabajo.
Por ejemplo, una persona que pasa más horas de las necesarias frente a la computadora navegando por Internet, descuidando su vida cotidiana, personal, familiar y hasta laboral, enviando correos electrónicos, chateando o jugando, puede considerarse como un ciberadicto.
Así lo consideran especialistas como la siquiatra Hilarie Cash, cuyo consultorio, Internet/Computer Addiction Services, en la Universidad de Pennsylvania, es visitado por pacientes diagnosticados con DAI.
Cash identifica como síntomas del DAI la constante preocupación por estar conectado, así como mentir acerca del tiempo que se pasa navegando o sobre el contenido visualizado, además de aislamiento social, dolor de espalda y aumento de peso.
?Si el patrón de uso de Internet interfiere con tu vida o tiene impacto en tus relaciones de trabajo, familiares y de amistad, debes tener un problema?, anota otra experta, Kimberly Young, investigadora líder de las adicciones a Internet.
Young es la fundadora del Center for Online Addiction, con sede en Bradford, Pennsylvania, donde funcionan grupos de apoyo a las ciberviudas, esto es, las esposas de adictos a las relaciones amorosas por Web, la pornografía on line o las apuestas vía Internet. En opinión de Young, los ciberadictos optan por el placer temporal en lugar de relaciones íntimas y profundas y entran en un círculo vicioso, ya que la pérdida de autoestima crece a medida que aumenta su adicción, lo que a su vez eleva su necesidad de escapar de la realidad y refugiarse en la Red.
?La infidelidad vía Internet es el mayor problema que tratamos. Más de 50 por ciento de nuestros clientes son individuos y parejas que sufren sus secuelas?, dice Young, autora del libro Atrapado en la Red, que aborda el tema del ciberadulterio.
