Nosotros Las palabras tienen la palabra VIBREMOS POSITIVO Eventos

Es Bueno Saberlo

C. L. Guillermo Valdez Cázares

ENTRETENIMIENTO

Dime tres cifras diferentes que sumadas y multiplicadas den el mismo resultado. Si no puedes hacerlo, más adelante te lo diré al igual que esta adivinanza: Una culebrita inquieta y pelada que llueva o no llueva siempre está mojada. ¿Qué es? Pregunta: ¿Por qué las casas de los gallegos tienen las ventanas redondas?

CONOCIMIENTOS

Cuento.? Se acercaba la Navidad y, un día, papá llegó sorpresivamente. Venía cargado de besos, risas, turrones, almendras, jamones y regalos. Venía de lejos a pasar una temporada con mamá y los niños, contento porque había vendido bastantes máquinas de sumar y restar. Contento porque todos estaban juntos de nuevo. El sábado por la noche hubo fiesta. No con limonada helada y raspado de vainilla, sino con vino, galletas, pollo frito y papitas. Apareció el tío Gonzalo, que vivía en la ciudad. Vinieron las Cervantes, los Reales, los Gutiérrez y otras personas, todos bien peinados y con trajes nuevos.

A Lucho y los niños les dieron permiso para estar levantados hasta tarde, casi ¡Una barbaridad! ¡Las doce de la noche! Abuela Modesta abrió la sala grande, la que tenía muebles de roble, mesa de centro, consolas de largas patas y carpetas de hiloseda, en donde estaba el piano cubierto con un mantón español y el retrato de un hombre serio y espelucado ?a quien Elsy miraba de reojo? quien no era un terrible pirata como los niños pensaban, sino, según explicó esa noche el abuelo, un gran músico.

Tía Merce se acercó cuando el abuelo hablaba del músico del retrato para preguntarle si quería una copa de vino o un ala de pollo. Él dijo que no, ?mil gracias niña Merce?, que el vino era suficiente. ¿No quieres algo? Preguntó ella. Él quería escucharla tocar. Quería que sus nietos, Elsy, Falsy, Luisito y Lucho, supieran quien era Beethoven, el músico y gran hombre, aunque lo olvidaran enseguida y tuvieran que recordarlo luego.

Tía Merce estaba muy linda con su vestido blanco. Se sentó al piano, en la butaca de tres patas, sus manos morenas sobre el teclado, la espalda derechita y el pelo negro y brillante; y en medio de un silencio abismal, comenzó a tocar. Era una música de olas, de llanuras y de ángeles. El viento en el desierto y las golondrinas en la mitad de la tormenta. En ese mismo momento, Falsy supo que tenía un corazón en la mitad del pecho, un corazón que cabalgaba como caballito de carreras? Y pensó que nunca, nunca dejaría ir esa noche, ni cuando fuese tan alta como mamá o tan vieja como Nana Narza, porque tía Merce había tocado especialmente para los niños e interpretaba una sonata de ese músico de nombre terrible, casi imposible de deletrear.

Falsy supo entonces que el abuelo trataba de decir cuando hablaba del recuerdo y del olvido, y se dijo: ¡No quiero olvidar! ¡No debo olvidar! Entonces, una cinta verde comenzó a escurrirse por el gran portón que daba a la Calle donde Canta la Rana. Era una cinta que se movía e iba derechito al piano y a la música. Y ya nunca, aunque pasara un millón de años. Los niños olvidarían esa noche.

La primera persona en advertir a la verde y sedosa serpiente de monte fue mamá. Rápidamente agarró a Luisito y a Elsy, que estaban a mano, y chilló? ¡Socorro! ¡Auxilio! Lucho comenzó a aullar, como un indio caribe en pie de guerra, pidiendo a gritos su lanza, su caballo y su reino, mientras Falsy, de un brinco, se encaramaba sobre el piano. Y la tía Merce seguía tocando.

Las señoras lloraban, los hombres pedían palos y herramientas, los que venían de la vespertina del Teatro Colón se asomaban a las ventanas y Tía Merce seguía tocando. ¡Quieto todo el mundo! ?Ordenó el abuelo-. ¡Nadie se mueva! Mas todos lloraban, y papá intentaba calmarlos. Las Cervantes se secaban las lágrimas con pañuelitos bordados, los Gutiérrez comían pollito frito y mi tío Lucio y tío Gonzalo escuchaban la música embelesados. Y tía Merce, derechita y sin moverse seguía tocando el piano.

Momentos después, la verde serpiente se deslizó, ondulante, alejándose del piano, y fue hasta el rincón de la sala en donde mamita Modesta había dejado un tazón con leche tibia. Papá y Lucho consiguieron un palo con horqueta, informaron a la serpiente que no estaba invitada a la fiesta, y se la llevaron, enredada en el palo, camino del monte. Abuelo se opuso a que la mataran. No era un animal venenoso, dijo, y tal vez quería hacer una visita de cortesía.

Beethoven era un sujeto despeinado y lo que era una sonata ni Elsy ni Falsy ni Luisito lo sabían; tal vez Lucho sólo un poquito. Pero era algo grande, sonoro y maravilloso, como el viento del este, el ancho mar, la salida del sol o la luna nueva. Quería decir que estaban juntos, felices, que eran una familia y tenían los ojos abiertos. Eran mamá, papá, tía Merce, tío Lucio y tío Gonzalo. El abuelo Tomás González y mamita Modesta, Falsy, Elsy, Lucho y Luisito.

Falsy nunca olvidaría, siempre, siempre, tendría esa noche en su memoria. Afuera, en la calle, se encendían montones de espermas, que titilaban con alegre chisporreo, y convertían la noche en un día iluminado y feliz, en una fiesta de cocuyitos y de hadas. ¿Qué día es hoy? Preguntó la niña, siete de diciembre ? respondió el abuelo Tomás.

Se acercaba la Navidad, que es tiempo de buñuelos, regalos, pesebres, campanas y misa de gallo. Pronto los niños cantarían los villancicos y comenzarían a buscar hierbas, papel encerado, espejos redondos para los lagos de Belén y lentejuelas para la estrella de oriente?

LOS LEONES

Estamos realizando en el Club de Leones de Gómez Palacio, A. C. un ?Centro de Acopio? en donde puedes donar cobijas y ropa que aún se pueda utilizar, alimentos no perecederos, dulces y juguetes para los olvidados de ?Santa Claus? y los recuerden los ?Reyes Magos?. Tu contribución nos ayudará para abrigar y alegrar un poco estas fechas a nuestros hermanos menos favorecidos.

Tus contribuciones las puedes efectuar en avenida Mina número 1571 sur de Gómez Palacio, Dgo. y los donativos en efectivo en la cuenta No. 069951767 de Banorte, en esta misma ciudad. El Centro de Acopio estará hasta el día tres de enero de 2007.

Felicitamos al Club de Leones de Lerdo que cumplió 50 años de haberse fundado y que lo celebraron con una Campaña de la Vista el pasado día 14, en donde se atendieron a 400 pacientes, regalando los lentes graduados y apoyados por nuestro club; también aprovechamos para expresar nuestro reconocimiento al C. L. Dr. Gerardo Bañuelos Garza, coordinador de nuestras Jornadas Médicas apoyado siempre por su D. L. Verónica.

Acompañamos en su pesar a Lupita y Manuel Alvarado por el deceso del Sr. Francisco Moreno Gallardo, padre y suegro de nuestros compañeros, así como a Yolanda de Santibáñez y familia por el fallecimiento de su querido esposo Joel Santibáñez R. que perteneció a nuestro club.

Aprovechamos este espacio para desearles a todos nuestros lectores una Feliz Navidad y que el año venidero, se cumplan todos sus propósitos no sin antes agradecer a quienes nos ayudan y nos siguen apoyando en todos los eventos que realizamos para canalizarlo en beneficio de nuestras comunidades.

Entretenimiento: La respuesta de los números es: son el uno, el dos y el tres, ya que 1+2+3=6 y 1x2x3=6. ¿Sencillo no? Adivinanza: (La lengua). Pregunta: Para que entre el sol. Agradezco tus comentarios y sugerencias al e-mail:

clubleonesgp@prodigy.net.mx

¡Hasta la próxima! Nosotros servimos.

Leer más de Nosotros

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Nosotros

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 252365

elsiglo.mx