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HIROSHIMA, Japón.- El trío de Pau Gasol, Juan Carlos Navarro y Jorge Garbajosa pesó demasiado para Nueva Zelanda y condujo el sábado a España a una victoria 86-70 en la jornada inaugural del Campeonato Mundial de Basquetbol.
Gasol, estrella de los Memphis Grizzlies, se hizo cargo de la pintura, mientras que Garbajosa y Navarro hicieron lo suyo desde afuera para terminar con 16 puntos cada uno. Garbajosa anotó cuatro triples y Navarro anotó siete puntos en los últimos cinco minutos y medio del tercer parcial, cuando España se despegó 68-48.
Los españoles, quintos en el mundial pasado, terminaron invictos en sus partidos de preparación y llegaron a Japón con el sello de favoritos para colgarse una medalla al cuello. Cuando Gasol encestó el primer canasto del último parcial, el trío español tenía la misma cantidad de puntos que Nueva Zelanda.
Los oceánicos jugaron sin su armador titular Mark Dickel, suspendido diez días por la FIBA tras arrojar positivo en una prueba de dopaje. Nueva Zelanda, cuarto en el pasado mundial, no recibió gran ayuda del suplente de Dickel, Kirk Penney, quien cometió dos faltas en los primeros 34 segundos. No consiguió puntos en los 1:52 que estuvo en la cancha en la primera mitad.
Una cesta de Casey Frank con 4:29 en el reloj del tercer cuarto acercó a Nueva Zelanda 55-46, pero España apretó los tornillos con una seguidilla de 13-2 y rayó los diez últimos puntos del parcial. Penney terminó con 15 puntos, Craig Bradshaw agregó 12 y Paul Henare 11. España enfrenta el domingo a Panamá, Nueva Zelanda a Alemania y Japón a Angola en otros desafíos del Grupo B.
La selección de Brasil cayó ayer por marcador de 77-83 ante su similar de Australia, en su debut en el Mundial Varonil de Basquetbol, mientras que Argentina se impuso a Francia 80-70.
La sexteta oceánica basó su triunfo en la excelente labor del alero Mark Worthington, quien con sus 23 puntos y siete rebotes se convirtió en el mejor jugador del partido correspondiente al grupo C.
En tanto que por Brasil, Leandro Barbosa, el armador de los Suns de Phoenix de la NBA, fue el jugador más sobresaliente del equipo sudamericano al conseguir 18 puntos. Hoy domingo la escuadra de Brasil se verá las caras con la representación de Qatar que perdió 84-64 ante Grecia, mientras el equipo de Australia se medirá a Turquía que doblegó a Lituania 66-64.
En otros resultados, el seleccionado de Venezuela cayó 72-82 ante Líbano, en tanto Nigeria se impuso 82-75 al bicampeón del mundo, Serbia y Montenegro, gracias al estupendo trabajo del alero Ime Udoka que marcó 18 tantos y del escolta Ebi Ere que aportó 15 puntos.
Alemania, por su parte, derrotó 81-70 a la selección anfitriona con su estrella de los Dallas de Mavericks, Dirk Nowitzki, quien en tan sólo siete minutos anotó 14 puntos a los japoneses.
Angola venció 83-70 a Panamá, mientras que Eslovenia superó por 96-79 a Senegal, e Italia batió a China por 84-69.
El Mundial de Japón continuará su acción hoy con la segunda jornada, en la que se destacan los duelos Estados Unidos-China, España-Panamá, Francia-Serbia y Montenegro e Italia-Eslovenia, además de Argentina-Líbano.
Puerto Rico aguantó durante 20 minutos, tambaleó en el complemento y cayó el sábado 111-100 ante Estados Unidos en el debut de ambos equipos en el mundial de baloncesto de Japón.
El león norteamericano fue domado en la primera mitad por el látigo de Carlos Arroyo, verdugo estadounidense en los Juegos Olímpicos de Atenas. Los colmillos salieron a relucir con furia en la segunda parte, y Estados Unidos arrancó con el pie derecho un torneo que no gana desde 1994.
Estados Unidos tenía fresca en la memoria el recuerdo de los Juegos Olímpicos de Atenas, donde Arroyo tuvo una actuación magistral y condujo a los boricuas a un histórico triunfo 92-73.
Arroyo hizo lo posible por repetir la historia y terminó con 23 puntos y cinco asistencias, pero su concierto fue un solo que no pudo competir en sonoridad con la orquesta estadounidense dirigida por el trío virtuoso de Carmelo Anthony, LeBron James y Dwayne Wade.
Anthony encendió los motores cuando su equipo más lo necesito y firmó 21 puntos, 13 en una primera mitad en la que mantuvo la calma en el bando estadounidense frente al incesante ataque puertorriqueño.
James, el fenómeno de los Cavaliers de Cleveland, marcó 15 tantos, atrapó seis rebotes y repartió seis asistencias. También deleitó a la concurrencia con sus rápidas entradas a la pintura, clavadas de lujo y pases de cirujano. Kirk Hinrich coló 15, con tres de cinco intentos de tres, y Wade terminó con 13.
Estados Unidos dominó los tableros 36-27, con 18 rebotes ofensivos. Larry Ayuso contribuyó con 14 puntos a la causa caribeña. La primera mitad fue de altibajos para Estados Unidos, que aún así la ganó 57-51. Los estadounidenses apretaron las riendas desde el arranque de la segunda, y con una racha de 12-2 en los dos primeros minutos, capitaneada por dos cestas de James, respiraron con tranquilidad el resto del duelo.
Cada vez que Puerto Rico intentó alzar vuelo, Anthony o James le cortó las alas con un canasto y lo bajó a tierra. Puerto Rico salió a toda velocidad de las compuertas, y para sorpresa de pocos Arroyo llevó la fusta del purasangre.
El base penetró la pintura con arrojo, por al lado y encima de las marcas, y acertó tiros brincados de todos los ángulos rumbo a 15 puntos en la primera mitad. Los boricuas tenían ventaja de 12-7 y parecían en control del partido hasta que James y compañía despertaron del letargo. Con seis minutos en el reloj del primer parcial, James encestó una penetración y luego aprovechó un robo para clavarla sin marca.
Otro hurto terminó en un donqueo de Wade, Dwight Howard coló un tiro libre y luego bloqueó un disparo, inició el rompimiento rápido y culminó en un triple de Shane Battier para darle la ventaja a los norteamericanos. Arroyo volvió a encontrar el aro y sacó a flote a los caribeños, que rayaron los cinco últimos tantos del parcial para terminar con delantera de 24-23.
El segundo cuarto fue el show de Anthony, quien encestó nueve puntos, incluyendo un triple. Estados Unidos cerró los dos últimos minutos de la primera mitad con una racha de 9-2, con dos tripletas de Joe Johnson, para irse al descanso con ventaja de 57-51.
Los puertorriqueños encestaron 11 de 13 tiros libres en los primeros 20 minutos, una estadística que los mantuvo cerca en el marcador, mientras que los estadounidenses apenas colaron cinco de 11 intentos.
Estados Unidos, sin embargo, hizo seis de 14 triples en la primera mitad y terminó con nueve desde el arco.
