FRANCISCO I. MADERO | TRABAJADORES INCENDIAN DOS BODEGAS Y UNA CAMIONETA EN LAS ÁNIMAS
EL SIGLO DE TORREÓN
Protestan empleados agrícolas por malos tratos e incumplimiento de contrato.
FRANCISCO I. MADERO, COAH.- La madrugada de ayer alrededor de mil 900 jornaleros agrícolas huyeron de la pequeña propiedad Las Ánimas, cuando 40 de sus compañeros incendiaron dos grandes naves de lámina que sirven como dormitorios, además de una camioneta, en protesta por las condiciones infrahumanas en que viven en ese lugar y el maltrato de los mayordomos.
Varios campesinos salieron heridos, con golpes en varias partes del cuerpo y luxaciones, por lo que fueron trasladados al Hospital General y a la Cruz Roja de este municipio.
En las inmediaciones del ejido La Virgen que colinda con Jauja, Durango, se encuentran los cultivos de tomate y chile de Las Ánimas, propiedad de Felipe Negrete López, donde los campesinos trabajan de amanecer a atardecer por un salario de 85 pesos diarios durante dos meses que dura el contrato.
Procedentes de estados del sur de la República y motivados por la promesa de un bono de productivi-dad de mil 900 pesos, esta vez fueron más los hombres que se trajeron a sus esposas e hijos con la esperanza de juntar más dinero que otras veces. Mujeres embarazadas, adolescentes y niños también fueron contratados.
Concentrados en la placita de la comunidad de La Virgen, luego de su huida de Las Ánimas, aseguran que todo empezó a las 22:30 horas de la noche del pasado lunes.
Un grupo de trabajadores se molestó por las promesas incumplidas del dueño de la pequeña propiedad y los malos tratos de los mayordomos que identificaron como Valentín, ?El Alacrán? y Pedro Sánchez.
Los jornaleros estaban tomando a las afueras de los bodegones en los que duermen, cuando los capataces los empezaron a intimidar. ?Nos agredían verbalmente y nosotros no nos dejamos?, dijo Santos Ramírez, uno de los campesinos. Lo que empezó en discusión, continuó en golpes. Otros jornaleros que ya estaban acostados, al escuchar los golpes salieron para auxiliar a sus compañeros.
De inmediato se dio aviso a la Dirección de Seguridad Pública de Madero. Los jornaleros hartos de las groserías y de presuntos intentos de violación hacia sus mujeres por parte de los capataces, fueron por diésel e incendiaron dos naves, fue entonces cuando se desató la huida. Los que dormían, al ver las llamas salieron corriendo de sus dormitorios, unos al campo, otros a la plaza del ejido La Virgen.
Cerca de 30 personas fueron encerradas en la cárcel de Madero. Pedro Sánchez, capataz, acusó a los jornaleros de iniciar la trifulca.
?Se envalentonaron porque andaban tomados o quizá hasta drogados, pero la verdad, ya era mucha injusticia la que estábamos viviendo?, comenta una ama de casa de nombre Raquel, originaria del estado de Hidalgo, quien al igual que todos los que se concentraron en la plaza, pedían regresar a sus casas, no sin antes recibir el dinero que les fue prometido por realizar su trabajo.
Reina Hernández, de San Luis Potosí, se queja por las condiciones que padeció y relata la experiencia de hace dos días: ?Nos asustamos mucho... corrimos como pudimos entre las parcelas con la intención de salvarnos porque a esa hora realmente no sabíamos lo que estaba pasando, por eso ya nos queremos ir pero con nuestra paga, porque nosotros no tenemos la culpa de todo esto?.
Ayer los sureños recibieron ayuda por parte de la Presidencia Municipal y las familias de La Virgen.
Al lugar llegó la titular de la Jurisdicción Sanitaria VII, Irma Santoyo Gómez, quien señaló que la irregularidad sobre las condiciones laborales viene desde el contrato que está por el Instituto Estatal del Empleo en Durango y no por Coahuila, por lo que se abrirá la investigación correspondiente.
